¿Cómo reclamar ante el cambio de hora o fecha de un sorteo?

Hace unos días se difundió en las redes sociales el caso de Alexandra Zavala, una cliente del supermercado Metro que mostró que la empresa no había respetado el horario de realización de uno de los sorteos. A propósito de esa situación, El Comercio presenta las condiciones en que se deben realizar estos eventos y qué se puede hacer ante incumplimientos.

Los sorteos deben contar con un permiso otorgado por la Oficina Nacional de Gobierno Interior (Onagi) del Mininter. En caso de no recibirlo, las empresas recibirían una sanción de la entidad mencionada. 

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Según Yasmina Riega, coordinadora de la carrera de Derecho y Ciencias Políticas de la UPN, existen otros inconvenientes que los consumidores suelen reclamar, como por ejemplo, que el premio no tiene las características señaladas, se posterga reiteradamente la entrega del premio y/o la hora y fecha del sorteo se modifican sin previo aviso. En estos casos, la entidad encargada de sancionar es el Indecopi.

Ángela Sevilla, funcionaria de la Comisión de Protección al Consumidor del Indecopi, dijo que ellos actúan cuando se infringe el deber de idoneidad. En otras palabras, cuando no se cumple con lo prometido a los consumidores. “Para ello solicitamos al proveedor y a la Onagi los términos acordados para la realización del sorteo”, indicó.

CASINOS EN ROJO
Sevilla precisó que las quejas que más recibe el Indecopi en estos casos involucran a los casinos y tragamonedas, pues existe una gran cantidad de sorteos y regalos para los clientes, pero también quejas de que no necesariamente se cumple con la entrega.

Por su parte, Riega explicó que para un sorteo es necesaria la participación de un representante de la Dirección General de Gobierno Interior, para que  supervise el cumplimiento de lo autorizado. ¿Pero, eso sucede en todos los tragamonedas del país? En ese sentido, la responsabilidad de verificar que los sorteos de las firmas comerciales cuenten con autorización es responsabilidad absoluta de la Onagi, para así evitar que los consumidores sean los perdedores.

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