En lo que va del año se instalaron 5.000 antenas más en Perú

El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) confirmó que tenemos casi 20 mil estaciones base de telefonía móvil montadas en nuestro país. Esta es una cifra positiva si consideramos que son 5.000 más de las instaladas al cierre del 2015 y el doble de lo que teníamos a inicios del 2014. Sin embargo, aún son pocas si se toma en cuenta el enorme déficit pendiente: aún faltan 22 mil antenas.

¿Por qué sabe a poco un crecimiento del orden del 50% anual? Walter Sánchez, gerente regional de negocios cloud en Cisco, nos recuerda que en el país venimos arrastrando un déficit en antenas del 40% y nos enfrentamos a un alza en la demanda de por lo menos 22% anual y un tráfico móvil que se multiplicará nueve veces hasta el 2020.

Somos nosotros, los usuarios, quienes generamos esa mayor demanda al migrar a los smartphones. 

A la fecha, hemos triplicado la penetración de dichos equipos en tan solo un par de años y, además, elevado nuestro consumo de Internet móvil gracias a todas las nuevas y populares aplicaciones que incluyen. Así, somos más de 15 millones de usuarios (según Osiptel). 

Pokémon Go y su realidad aumentada ha sido un excelente primer ejemplo de lo que se nos viene en términos de tráfico móvil. Seguir por las calles a Pikachú usando un mapa consume en un minuto unos 2 megabytes, el doble de lo que gastaríamos en Facebook. Eso originó que, por ejemplo en Brasil, algunos operadores no fueran capaces de hacer frente a la demanda inesperada.

Héctor Silva, director tecnológico regional de Ciena, comenta que este juego fue “más una advertencia que una alarma crítica”. Como era solo una app, la red local sobrevivió, pero se debe ver como una lección para prepararnos ante la llegada de más apps como esta.

Y no solo hablamos de juegos. La realidad virtual y/o aumentada llegará al márketing (la agencia Stringnet ya habla de catálogos interactivos) y a los estadios de fútbol con un streaming en vivo que permita “estar” dentro de la cancha.

UN VIEJO PROBLEMA
A inicios de año, antes de imaginar la pronta llegada de Pokémon Go, un estudio de Afin (Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional) calculó que la brecha en el sector telecomunicaciones asciende a US$27.036 millones, de los cuales US$6.884 mlls. son en materia de telefonía móvil. 

Esta cifra alerta sobre la necesidad de acelerar las inversiones privadas en el sector. Para esto, se requiere una serie de reformas legislativas, asegura Fernando Cáceres, presidente de CpR (Contribuyentes por Respeto).

Ante esto, los operadores han reaccionado. Telefónica acaba de anunciar inversiones por US$3.000 millones hasta el 2020 y asegura que en lo que resta del año montarán un promedio de seis antenas al día. Ya tienen montadas 11.146 antenas, de las cuales 2.389 son para la red 4G, que atiende 2,4 millones de clientes. Claro, por su parte, llega a 10.051 antenas, de las cuales 2.600 son 4G: casi el doble que en el 2015. 

A pesar de este dinamismo, Afin recalca que las innovaciones tecnológicas conllevan más infraestructura y no es posible ir al ritmo deseado porque aún se enfrentan barreras burocráticas ilegales e irrazonables. Muchos municipios, como La Molina, en Lima, o San Sebastián, en Cusco, son reacios a acatar las normas del Ejecutivo y entorpecen la expansión, añade Nino Boggio, vocero de Entel. 

¿Es la creación de más normas la solución? Fabio Medina, de Ciena, aclara que soportar el tráfico de 4G (y pronto 5G) implicará idear soluciones creativas para  reordenar las redes con eficiencia. Silva añade que ayudará montar redes bajo demanda, virtualizar algunas funciones de las centrales y mover los equipos a las zonas en donde hay más tráfico. 

Dichas salidas, no obstante, no serían suficientes. “Tampoco se trata de dictar muchas normas”, aclara Cáceres, sino de diseñar políticas de cumplimiento y evitar trasladar las barreras burocráticas a la etapa de fiscalización, como está sucediendo.