Fútbol impacta más el PBI de los países en vía de desarrollo

El fútbol no solo es lo más importante entre lo que no es importante, como dice Jorge Valdano, sino que, según el investigador principal de Grade, Hugo Ñopo, se ha convertido en un dinamizador importante de la economía, sobre todo en países en vías de desarrollo como el nuestro. 

Ñopo y su colega Ana Paula Franco,  han publicado en focoeconomico.org algunas tesis y cuadros estadísticos que respaldan la teoría de que la alegría de clasificar al Mundial Rusia 2018 también viene acompañado de, al menos, medio punto de incremento del PBI en los próximos cuatro trimestres. 

El impacto de la alegría se ve desde las renovaciones de televisores, el aumento de consumo bebidas y la venta de polos. También está desde la renovación de vajilla hasta el cambio de muebles en la sala para poder ver más cómodamente los partidos.

Pero este dinamismo no es igual en todos los países. Según expusieron, existe un contraste entre el crecimiento que implica clasificar en una potencia o en un país en vía de desarrollo. A mayor riqueza, menor impacto.

Los resultados de sus análisis, explicó, muestran que dos trimestres antes de iniciar el Mundial de fútbol pasado la economía de los países clasificados comenzó a crecer por encima de la de los no clasificados comparables, con una diferencia mayor al medio punto porcentual. Esto se mantuvo durante cuatro trimestres, es decir mientras duró el Mundial y dos trimestres más. Después de eso el crecimiento de las economías de ambos grupos en comparación pasó a ser similar.

Sin embargo no todos los incrementos fueron iguales ¿Qué países se beneficiaron más del crecimiento mundialista? Según señalaron, el boom de crecimiento fue mayor en los países en desarrollo, particularmente de América Latina, donde el fútbol es el deporte estrella. En estos países el boom se dio más temprano y de mayor magnitud, pero se desvaneció más rápido. 

Según Ñopo basta observar las eliminatorias para el Mundial Rusia 2018 para darnos cuenta: Panamá y Perú declararon feriado nacional el día posterior a la clasificación. Esto no pasa en ningún país europeo, asiático o de Oceanía. En cambio en Wellington, el día del partido de ida del repechaje, los neozelandeses estaban alentando a los All-Blacks (su selección de rugby) y nuestro partido no era prioridad en su agenda. 

Además está el factor que el canal del consumo para crecimiento es más fuerte cuando existe novedad, es decir cuando no se va a un certamen Mundial luego de mucho tiempo.

"Para un país como Alemania, por ejemplo, no hay novedad por clasificar. Lo raro sería no clasificar, como pasó con los italianos este año. En cambio, para Perú o Panamá, la clasificación es un shock positivo difícil de predecir", acotó.

Otro ejemplo de consumo más sencillo es que todos los alemanes ya tienen los televisores y equipos de sonido de última generación para  ver a su selección. Los peruanos, en cambio, comprarán uno para ver a Perú porque está camino al Mundial Rusia 2018, lo cual no habrían hecho si ya hubieran renovado TV para Brasil 2014. 

"Según estos criterios, y si lo que ocurrió en Brasil 2014 es un predictivo razonable de lo que puede ocurrir en el Mundial Rusia 2018, las noticias para lo que pueda pasar en Perú son alentadoras", acotó. 

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