En los últimos años, según expertos en competitividad como Michael Porter, los negocios más exitosos son aquellos que no se preocupan exclusivamente por hacer dinero. De hecho, explica Porter en diversos artículos, la rentabilidad de un emprendimiento dependerá de saber definir una propuesta de valor coherente con los valores del público al que nos dirigimos, que sabrá recompensar a la compañía con su preferencia. Para Marshall Goldsmith, otro gurú empresarial, los consumidores en la actualidad no solo exigen productos de calidad sino también que las empresas que los producen sean respetuosas del medio ambiente, de la comunidad o de la niñez, solo por citar tres ejemplos. Por lo tanto, para ambos expertos, la venta será la consecuencia lógica de generar una conexión más allá de los beneficios utilitarios de los productos o servicios. ¿Cómo lograr esta complicidad con el mercado?
Según Carlos Martínez Trujillo, fundador de la agencia de publicidad Bienal de Comunicación, localizada en Mérida, Yucatán (México), la única forma de añadir contenido a los productos o servicios es con un solo elemento: pasión. “Indudablemente se puede ganar dinero haciendo cosas que a uno no le apasionan, por el simple hecho de ser negocios rentables. Sin embargo, en el largo plazo, es difícil mantener el ritmo y la dedicación que se requiere solo para hacer dinero. Lo que mantiene nuestros negocios en movimiento es el propósito detrás de lo que hacemos”, explica Martínez Trujillo en un artículo de la revista Mundo Ejecutivo, quien ha creado el concepto Working Rocking para explicar esta filosofía, que significa hacer empresa con una alta dosis de pasión por lo que hacemos. “Trabajar con pasión significa que el cliente va a actuar de la misma forma. Buscamos generar una sonrisa en los ejecutivos y una reflexión de que no se trata de evolucionar la marca, también es crear una revolución”, afirma Martínez Trujillo.
Para este empresario, la velocidad de los negocios hace que las organizaciones hagan del ejercicio de lanzar marcas al mercado una práctica repetitiva, minimizando la importancia que existe detrás de crear marcas como conceptos o filosofías de vida.
EL CÍRCULO DE ORO
Respecto de hacer negocios con pasión, el experto en temas de liderazgo Simon Sinek -autor del libro “Start with Why: How Great Leaders Inspire Everyone to Take Action”- ha desarrollado un modelo simple pero poderoso de liderazgo a partir de la pasión, basado en un sistema de tres anillos a los que define como el “círculo de oro”, que propone el hacerse las preguntas "¿por qué?", "¿cómo? " y "qué" antes de lanzar cualquier iniciativa de negocio al mercado.
- EL PARA QUÉ. El primer círculo gira alrededor del por qué del emprendimiento. Cuando la compañía apunta únicamente a un fin transaccional solo vende commodities. En cambio, cuando lo que la compañía vende refleja su misión, le añade un propósito a sus productos.
- EL CÓMO. El segundo círculo representa la forma en la que la compañía materializa o lleva a la práctica el para qué. Es la forma o el camino que elige para convertir el sueño del para qué en algo viable, transable y realizable. Aterriza los ideales y el propósito superior del emprendimiento.
- EL QUÉ. El tercer y último círculo define lo tangible y específico que va a ofrecer la compañía a su mercado. Es la forma última que elige para reflejar el propósito que permite que éste sea viable. Son los productos y servicios finales y tangibles que la empresa sacará a la venta.
“Partir de lo que la empresa vende es partir de algo carente de alma y significado. Es simplemente un objeto que presta un servicio, una función, como muchos otros de su tipo. Y ya hay mucha gente y muchos negocios ofreciendo buenas soluciones. No necesitamos más de lo mismo. Necesitamos negocios que sean el reflejo de un fin superior, de un sueño, de un propósito, de una misión por cumplir, producto de una pasión. Debemos definir un producto no a partir de qué vamos a vender sino de para qué queremos introducir un nuevo producto al mercado”, explica Sinek en su participación en los Ted Talks.
Ahora que conoce más del Worcking Rocking o trabajar con pasión, ¿cómo la aplicará en su próximo emprendimiento?