la gran transformación

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n quechua, Ollanta significa “el guerrero que todo lo ve”. Según doña Elena Tasso, el nombre obedece a un proyecto de Isaac Humala, etnocacerista convencido de que el único camino para llegar al poder era mediante un golpe. “Ollanta nos dijo que quería cumplir el sueño de su padre”, declaró a La Primera en marzo del 2006 ambos se alzaron en Locumba (Tacna) el 29 de octubre del 2000, la noche que Montesinos fugaba en velero. Gracias a una amnistía, Ollanta retomó sus labores como agregado militar, mientras Antauro preparaba el andahuaylazo, motín de año nuevo del 2005 donde murieron cuatro policías. Ollanta deslindó responsabilidades, pero construyó su campaña presidencial del 2006 sobre la imagen de militar autoritario de izquierda. Afín al proyecto bolivariano de Hugo Chávez, Humala bautizó su plan como “La gran transformación”, que incluía una asamblea constituyente, la suspensión del TLC con EE.UU., participación estatal en la economía y tolerancia cero contra la corrupción. Aunque sus padres apoyaban la candidatura de su hermano Ulises, el racismo de don Isaac (“en el Perú tienen que gobernar los cobrizos”) y la intolerancia de doña Elena (“con dos homosexuales que se fusilen ya no habría tanta inmoralidad”) salpicaron a Ollanta, que cambió el polo rojo y moderó todavía más su discurso para las elecciones del 2011.