Igor Mostovenko daba sus primeros pasos en la pasarela luciendo un traje beige claro, sandalias gladiadoras y un pañuelo XL alrededor del cuello que llevaba el nombre 'Noe Bernacelli' impreso. Pulcro y sofisticado. Así fue el inicio de la primera línea presentada por el diseñador llamada 'Nude'.
Inspirada en las distintas razas del ser humano, la colección masculina del diseñador iba subiendo la temperatura del lugar: desde beige claro hasta marrón oscuro. Un paseo por los distintos tonos de piel y un análisis del lenguaje corporal que emana de cada uno de ellos.
En clave sporty pero con algunas prendas extras de tipo formal- clásicas del diseñador - es lo que vimos desde la pasarela. Trajes, gabardinas, sudaderas, shorts y conjuntos. Todo en siluetas holgadas que fluían con cada pisada.
Minutos después, 'Mitazh' hizo su entrada triunfal al desfile. La prolongación de su colección otoño-invierno 2018- inspirada en la musa de Christian Dior, Madame Bricard- se caracterizó por prendas bajadas al llano. Dejando de lado los vestidos formales, esta propuesta optó por lo 'ready to wear' sin dejar el sello sofisticado y sensual que caracteriza al diseñador.
Trajes sastres, faldas midi, vestidos y conjuntos fueron acompañados por tacones aguja, pañuelos, lentes y carteras en clave mini. Todo bajo el lienzo del marfil, negro y beige- colores presentados en la colección invernal- con el tono fucsia como único miembro nuevo.
Como siempre, Noe Bernacelli dejó huella.