Bailes andinos son memoria viva en Villa El Salvador
Luis Silva Nole

El sol es despiadado. La calamina deja pasar el calor y la pista de baile es un microondas gigante en medio de la urbanización Pachacamac, en el sector 1 de Villa El Salvador.

Antes de comenzar a zapatear, Vicente Aymara Castillo se había remangado la camisa hasta los codos. No fue suficiente. Apenas empieza a sonar un carnaval apurimeño, se la desabrocha lentamente mientras balancea la cabeza al ritmo cadencioso y festivo que imponen la quena y la mandolina.

Sus pies se despegan del suelo de manera alternada. Su cuerpo es un resorte que salta incansablemente de un lado para el otro. Sus ojos, cerrados. Su sonrisa, amplia, desdentada. Su alma encuentra el placer máximo en la música. Su mente evoca las fiestas que disfrutaba de joven en su natal distrito abancaíno de Lambrama. El sentimiento y la nostalgia mezclados con gozo tienen un sabor especial en el patio del Centro Integral de Atención del Adulto Mayor (CIAM) de la Municipalidad de Villa El Salvador.

Vicente tiene 73 años y es una de las 40 personas adultas mayores que bailan felices todos los miércoles, de 3:30 p.m. a 5 p.m., en el taller gratuito de danzas folclóricas que se imparte en el local que se ha convertido en el punto de reunión de los fundadores del distrito.

Cada sesión de baile folclórico es una fiesta con nostalgia por el terruño dejado atrás. (Foto: Alonso Chero / El Comercio)

El 11 de mayo de 1971 el gobierno de Velasco otorgó terrenos contiguos a la Tablada de Lurín a la comunidad de migrantes, en su mayoría de la sierra, que un año antes habían invadido zonas cercanas a San Juan de Miraflores, siempre en el sur de Lima. Ese día fue el inicio formal de Villa El Salvador y de una nueva vida para Vicente, eximio violinista vernacular, quien había emigrado a Lima con la esperanza de un futuro mejor.

Hoy, con seis hijos y una vejez feliz, Vicente mira para atrás y se enorgullece de 45 años de lucha por dotar, junto a otros vecinos y dirigentes locales tan añejos como él, de cualidades y servicios de ciudad pujante a Villa El Salvador.

Para el periodista y antropólogo de la PUCP Raúl Castro, Vicente y el grupo de danzantes pertenecen a la ola de migrantes que, según describió José Matos Mar en “Desborde popular y crisis del Estado”, llegó a Lima empujada por la desestructuración social y económica del campo generada por decisiones de Velasco. “Fue una migración dolorosa de gente con gran riqueza cultural. Sus danzas son para ellos puntos de ebullición de esa riqueza”, explica Castro.

El otrora arenal, árido, desértico, insensible, sobre el que se levantó Villa El Salvador, reconocido como distrito recién en 1983, luce hoy desarrollado. El baile también sabe a mezcla de sensaciones: orgullo por haber sido protagonistas de la creación de una ciudad de la nada y victoria por haber salido a flote frente a embates terribles: todos en el taller de danzas folclóricas recuerdan con dolor, por ejemplo, el asesinato de la dirigente María Elena Moyano a manos de Sendero Luminoso, acaecido en 1992.

LIMA 26 DE ENERO DE 2016CENTRO DEL  ADULTO MAYOR EN VILLA EL SALVADOR EN DONDE LOS ANCIANOS REALIZAN ACTIVIDADES COMO LAS DANZAS FOLCLORICAS. LA MUNICIPALIDAD DE ESTE DISTRITO ESTA A CARGO DE ESTE ESTABLECIMIENTO.

Antes de las clases de baile hay calentamientos. “La danza les refuerza su identidad”, dice Guido Iñigo, alcalde de VES. (Foto: Alonso Chero / El Comercio)

Semana a semana suenan también piezas de carnavales ayacuchanos y cajamarquinos, huainos, huaylarsh y santiagos. “Cuando escucho la música siento que me pican los pies. La danza nos hace mucho bien a los huesos y a los músculos”, reconoce María Bazán Encarnación, de 75 años, otra fundadora del distrito. Ella no es de la sierra. Nació en Chancay, al norte de Lima, pero igual desfoga en el baile el estrés de sus batallas personales. Luego de que su pareja la abandonara hace 46 años, ella emprendió con sus cinco hijos la aventura de colonizar lo que hoy es Villa El Salvador. Y triunfó.

TALLERES MUNICIPALES DE DANZAS FOLCLÓRICAS PARA LA TERCERA EDAD EN OTROS DISTRITOS

MIRAFLORES
marinera y tondero. Lugar: CIAM Armendáriz, ubicado en calle Arístides Aljovín 153. Marinera norteña: lunes, miércoles y sábado, desde las 9 a.m. Tondero: sábado, de 10 a.m. a 11 a.m. Costo: S/7 por clase en ambos tipos de danza.

SURCO
marinera norteña. Lugar: CIAM de Surco, ubicado en Av. Mariscal Ramón Castilla 1070. Clases: los martes, de 10 a.m. a 11 a.m. y los miércoles, de 11 a.m. a 12 m. Más información en el teléfono 714-9632. Costo: S/4 por hora de clase.

LA MOLINA
danzas folclóricas. Lugar: CIAM de La Molina, ubicado en la cuadra 5 de la Av. Alameda del Corregidor. Clases gratuitas en diversos horarios de lunes a viernes. Énfasis en tondero. Informes para inscripciones en el 313-444, anexo 333.

CERCADO DE LIMA
marinera y danza andina. Lugar: CIAM de Lima, en Jr. Conde de Superunda 341. Marinera limeña: martes, 3 p.m. (S/3). Marinera norteña: miércoles, 11 a.m. (S/5). Danza andina: viernes, 2 p.m. (S/2). Teléfono para informes: 426-3919.

SAN BORJA
danzas. Lugares: Tambo I del Polideportivo Limatambo y Tambo II del Polideportivo Rosa Toro. Marinera limeña, marinera norteña, tondero y danzas peruanas. Horarios toda la semana. S/5 y S/7. Teléfonos: 719-6009 y 719-9484. 

SAN ISIDRO
danzas. Marinera norteña: calle Los Halcones 243, Urb. Limatambo; martes, 9 a.m.; S/80 por mes; teléf. 221-3281. Danzas peruanas: Calle 16 s/n cuadra 1 esquina con Los Ruiseñores Este; martes, 4 p.m.; S/7 por clase; teléf. 226-4983.

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