Luz Armellón Valdez, la madre de la niña de 10 años que fue hallada muerta en un descampado de Mala, fue detenida por siete días por la policía de Cañete.
La orden de captura en su contra fue dictada por el Juzgado de Investigación Preparatoria de Mala al considerarla como sospechosa y cómplice del delito de parricidio, realizado presuntamente por su pareja y padrastro de la víctima, Juan Rubén Villalobos Acuña. Las investigaciones indican que ella habría encubierto al sujeto que presenta una requisitoria por violación sexual y que está no habido desde el día del crimen.
Sergio Muñoz, jefe de la División Policial de Cañete y Yauyos, confirmó que la madre cayó en varias contradicciones durante las investigaciones.
La mujer fue detenida a una cuadra de la plaza de armas de San Vicente de Cañete cuando intentaba llegar hasta el terminar terrestre para viajar a Chincha. En su poder se halló el documento de identidad de Juan Rubén Villalobos Acuña.
Previamente, la madre reconoció que mintió a la policía y las investigaciones señalan que habría tratado de distraer a los agentes al acusar a un supuesto vecino de lo ocurrido. Esto habría dado tiempo a su pareja para huir.
El Poder Judicial también tomó en cuenta que la madre no denunció a tiempo la violación sexual que su hija sufrió mucho antes de su muerte. De acuerdo a la necropsia, la pequeña fue víctima de abuso antes de ser asesinada, pero no era la primera vez que había sido agredida sexualmente.
Según América Noticias, fue trasladada a la División de Investigación Criminal de Lima. En tanto, dos de los hijos de Luz Armellón Valdez han sido entregados a su padre biológico, y los otros dos menores, hijos de Villalobos Acuña, fueron enviados a un albergue.
El domingo 7 de agosto, la menor salió aproximadamente a 2:30 de la tarde para cargar el celular de su madre en una tienda ubicada a media hora a pie de su casa. Horas después fue encontrada muerta en un descampado de Mala, Cañete.
