Hospital del Niño de San Borja tendrá gestión privada
Hospital del Niño de San Borja tendrá gestión privada
Lourdes Fernández Calvo

Cesia se lanza al agua, hace burbujas, sonríe e intenta flotar. Tiene 5 años, el 60% de su cuerpo está quemado desde hace diez meses, pero ella no se queja. Su piscina es una tina de hidroterapia en donde debe bañarse todas las semanas para limpiar sus heridas.

Un piso más abajo, en la Unidad de Cuidados Intensivos del área neonatal, un niño con diez días de nacido pelea por su vida dentro de una incubadora. Nació con los intestinos fuera de lugar. “Su pronóstico es bastante delicado”, dice la enfermera que lo vigila.
Como ellos, unos 96 niños, entre recién nacidos y adolescentes de 17 años, están hospitalizados en el Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN), ubicado en San Borja. La mayoría de ellos, que proviene de diversas  regiones del país, sufre de enfermedades de alta complejidad.

Hospital especializado
El INSN fue entregado en julio del 2011, pero recién empezó a operar en junio del 2013. Para su construcción el Estado invirtió S/.250 millones.

La demora se debió a un problema que aún no se ha logrado solucionar por completo: el déficit de médicos especializados, afirma Zulema Tomás Gonzales, directora del instituto. “Tenemos una brecha de recursos humanos a nivel de todo el Ministerio de Salud. Si bien hay médicos, lo que no hay son especialistas y subespecialistas en pediatría, como requería esta institución”, refiere.

Al INSN son transferidos los pequeños que han sido derivados de otros hospitales o centros de salud por tener enfermedades de alta complejidad, como malformaciones congénitas, tumores, problemas cardiovasculares, quemaduras severas, leucemia y otros trastornos sanguíneos.

Solo en este hospital existen los equipos tecnológicos para tratar estos males, sostiene Tomás. Las cirugías no tienen tiempo de espera y son atendidas en máximo una semana.

Hace apenas un mes se han incorporado siete especialidades quirúrgicas a las cinco que ya existían. Estas son oftalmología, otorrinolaringología, cirugía de cabeza y cuello, urología, ginecología, traumatología y odontología. “Al 2013 íbamos al 20% del funcionamiento. Este año ya llegamos al 65%”, agrega la directora del instituto.
No obstante, debido a la falta de información por parte de la población, así como a la falta de personal, no todas las 250 camas del hospital están ocupadas.

La ‘bata gris’
Desde el próximo 22 de octubre, el INSN será el primer hospital público que cuente con el servicio de ‘bata gris’, que consiste en que un privado preste los servicios de mantenimiento de los equipos de alta tecnología, áreas verdes, alimentación, lavandería, gestión de residuos hospitalarios, entre otros, a través de una asociación público-privada (APP). Los servicios médicos seguirán siendo prestados por el Ministerio de Salud (Minsa).

En julio del año pasado, Pro Inversión concesionó estos servicios no asistenciales al Consorcio Gestora Peruana de Hospitales por los próximos 10 años. Según el Minsa, esta licitación le ha ahorrado S/.17 millones anuales al Estado. Asimismo, se ha concesionado a una empresa la fiscalización del trabajo del consorcio ganador.

La ‘bata gris’ mejorará la calidad del servicio médico, ya que el Estado no tendrá que encargarse de gestionar los servicios asistenciales y así se dedicará exclusivamente a prestar los servicios de salud, afirma Zulema Tomás. Asimismo, el mantenimiento de los equipos será más eficiente, ya que el privado no tiene que pasar por los procesos burocráticos por los que pasa el Estado, agrega la directora.

El Minsa apuesta por la implementación de la ‘bata gris’ como el inicio de la reforma de salud que viene anunciando desde el 2013, cuando Midori de Habich era ministra. Los siguientes hospitales públicos a concesionarse son el Sergio Bernales y el 2 de Mayo.

Para el ex ministro de Salud Luis Solari este sistema solo será viable si se demuestra que los servicios le cuestan menos al Estado. Por su parte, Uriel García, también ex jefe del sector, opina que se debe priorizar la construcción de centros de salud en zonas de alta pobreza.

Contenido sugerido

Contenido GEC