Una cámara de seguridad registró el crimen en sala de firmas. (Captura de video)
Una cámara de seguridad registró el crimen en sala de firmas. (Captura de video)
Enrique Vera

El Poder Judicial absolvió a Pascual Cusilayme Yanqui y Álex Mejía Espinoza de los delitos de robo agravado y lesiones graves seguidas de muerte en contra de Félix Gonzales Victorio, cargos que se les imputaba desde el asalto a la , en Lima, ocurrido el 20 de febrero del 2013.

La fiscalía había sindicado a Cusilayme y Mejía como autores mediato e inmediato, respectivamente, del ataque a Gonzales Victorio. Sin embargo, la Cuarta Sala Penal para Procesos con Reos en Cárcel consideró que las pruebas presentadas en la acusación no acreditaban que ambos tuvieran responsabilidad en los hechos.


El abogado de la familia Gonzales, el doctor Ángel Alcalá, dijo a El Comercio que, para la sala, debía estar probada la existencia de una organización criminal conformada por Cusilayme y Mejía. Ello, de acuerdo con las figuras de autor mediato e inmediato –es decir, de jefe y subordinado– que se les atribuía en la documentación entregada por el Ministerio Público, sostuvo.

Hoy la defensa legal de la familia Gonzales presentará un recurso de nulidad ante la sentencia emitida.

—El asalto—
A las 3:10 p.m. del 20 de febrero del 2013, Pascual Cusilayme llegó a la notaría Paino, ubicada en la avenida Aramburú, en Surquillo, para suscribir la escritura de compraventa correspondiente a un predio de la familia Gonzales Victorio.

En la sala de firmas del local lo esperaba su hijo Luis Alberto y los hermanos Félix y José Gonzales Victorio. Ese día, aparentemente, Cusilayme llevaba S/270.000 en un maletín para pagar el impuesto de alcabala que demandaba la transacción.

Cuando Cusilayme terminaba de intercambiar saludos, tres hampones con el rostro cubierto irrumpieron en la sala. Uno de ellos disparó en la pierna a Cusilayme y le arrebató el maletín. Otro balazo dio en una pared y rebotó hacia el rostro de Félix Gonzales, quien moriría horas después en una clínica.

Hace seis años, tres hampones irrumpieron en la notaría Paino donde se firmaba la compraventa de un predio. Huyeron con S/270.000 dejando a un hombre baleado. (Karen Zárate / Archivo)
Hace seis años, tres hampones irrumpieron en la notaría Paino donde se firmaba la compraventa de un predio. Huyeron con S/270.000 dejando a un hombre baleado. (Karen Zárate / Archivo)

Desde entonces, Cusilayme era señalado como sospechoso del crimen por la familia Gonzales, pues una cámara de seguridad lo había grabado realizando llamadas antes de ingresar a la notaría. Además, veía de forma muy suspicaz que Cusilayme haya llevado a la notaría el dinero para cancelar la alcabala cuando ese pago se realiza mediante cheques de gerencia. El maletín, que supuestamente contenía el dinero, nunca apareció.

Tras las pesquisas iniciales fue detenido en Huachipa Álex Mejía Espinoza, alias ‘Carnero’. La policía sostenía que pruebas antropométricas habían arrojado que Mejía era uno de los delincuentes que había asaltado la notaría. También, que hallaron indicios de una vinculación entre Mejía y Cusilayme a través de apuntes en unas tarjetas.

Cusilayme estuvo en prisión cinco meses, luego siguió siendo investigado bajo comparecencia restringida. Mejía sí quedó encarcelado, puesto que lo sentenciaron por un delito anterior al ocurrido en la notaría Paino. En diciembre último cumplió su condena.

–El proceso–
En mayo del 2016, la Cuarta Sala para Reos en Cárcel inició el juicio oral contra Cusilayme y Mejía por el Caso Paino. La fiscalía pidió 28 años de cárcel para los dos, pero la condena que se les ordenó, en febrero del 2017, fue 15 años de prisión. Para entonces, Pascual Cusilayme había pasado a la clandestinidad. Las defensas de ambos procesados pidieron que se declaren nulas aquellas sentencias.

Casi un año después, en enero del 2018, la Corte Suprema accedió a las solicitudes de los condenados y ordenó un nuevo juicio oral. Este es el que concluyó ayer con la absolución de Cusilayme y Mejía. La sala revocó aquel fallo al considerar que las llamadas que hizo Cusilayme antes de entrar a la notaría no fueron a los presuntos delincuentes.

El abogado Ángel Alcalá declaró a este Diario que un mes antes de que se declare nula la sentencia de 15 años de cárcel, dictada en febrero del 2017, la policía comunicó a los deudos de Félix Gonzales que ya sabían de esa resolución.

“En diciembre del 2017 pedíamos que se capture a Cusilayme, pero la policía ya sabía que la sentencia se iba a anular. Esa resolución salió un mes después. Cómo sabía eso la policía”, indicó Alcalá.

Subrayó que, de la misma forma, 15 días antes de que se emita el veredicto absolutorio, un policía acudió al domicilio de uno de los hermanos Gonzales Victorio y les informó que Cusilayme y Mejía iban a salir libres.

“Ante ello la esposa de la víctima fue a buscar al presidente de la sala penal, pero este no la atendió”, dijo.

Ayer, ninguno de los procesados estuvo presente durante la lectura de sentencia.

A la salida de la audiencia, Irma Obando, viuda de Félix Gonzales, lamentó la resolución final. Señaló que ha quedado demostrado que “nuestra patria está con los magistrados de cabeza”.

La otra cara de la moneda fue la familia de Cusilayme Yanqui. Su hijo Luis Alberto Cusilayme Mamani comentó que así habían terminado seis años de sufrimiento.

El recurso de nulidad que presentará hoy la defensa de la familia Gonzales Victorio será sustentado en una sesión que se programará dentro de estos próximos cinco días. 

Pascual Cusilayme
Era sindicado como el autor intelectual del robo agravado seguido de muerte en contra de Félix Gonzales. Ayer fue absuelto de esas acusaciones.
Álex Mejía
Hasta ayer era procesado como presunto autor material del robo y homicidio en agravio de Félix Gonzales Victorio en la notaría Paino. También resultó absuelto. Estuvo en prisión por otro delito.
La Víctima
Félix Gonzales Victorio murió el 20 de febrero del 2013 de un balazo durante el asalto perpetrado en la notaría Paino.

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