Fernando Vivas entrevistó a Laura Bozzo para Somos.
Fernando Vivas

Ahora sabemos que José Francisco cobró por esos programas. Hay un contrato.
Yo ni sabía. Mírame a los ojos, te juro por mi vida. Que me caiga muerta en este momento, no tenía idea de que José Francisco cobraba.

Así hablan tus panelistas.
No tenía idea y José lo sabe. Yo estaba enamorada del doctor, no sabía dónde estaba parada.

Te acusaron de recibir tres millones; eso se cayó.
En la primera instancia.

Lo que no se cayó fue la caución de 5 mil soles que pagó Montesinos.
¿Tú crees que Laura Bozzo, que ganaba US$ 50 mil, se iba a vender a Montesinos por 5 mil soles? Tengo el voucher del Banco Wiese.

La Corte Suprema lo dice, he leído la sentencia.

Todo fue una cosa armada. La pagó mi chofer Hugo Vente. ¿Eso amerita que una sea corrupta?

Te lo pregunto de esta forma. ¿Qué pagaste con tus tres años de arresto domiciliario?
Mira, no sé qué pruebas me ha puesto Dios, porque me pone muchas. Pero me duele ver cómo personas que tienen testigos, millones en sus cuentas, están libres. Pero si queremos reconciliación, me olvido de todo. Voy a hacer especiales sobre cosas buenas que tenemos, se lo debo al Perú.

¿Qué es lo que admites que cometiste?
Te voy a decir qué cometí. No haberle hecho caso a mi madre cuando me suplicó casi de rodillas, ‘por caridad, no te metas en cuestiones que tú no sabes, no te dejes obnubilar por el poder porque la vas a pagar muy caro’. Llorando me lo dijo y por eso los tres años de arresto nunca me fue a ver, ni una sola vez. Murió después de una depresión porque ella me lo advirtió y yo no le hice caso.

Los Crousillat no podían ser tan echados por nada. ¿No sospechabas?
Yo veía cómo vendían las novelas, por eso no se me ocurrió. Años hemos sospechado de Toledo y nadie ha hecho nada.

Aprovecho para reconocerle a Laura que no se equivocó con Toledo. En respuesta, me cuenta con lujo de detalles cómo así el hermano de Lucrecia Orozco llegó a su ONG a presentarles el caso de Zaraí. Cristian Suárez, que nos acompaña en la entrevista junto a su hermano Elio, interviene para contar el fallido intento de Fernando Olivera de obtener un testimonio de Laura que echara dudas sobre Zaraí. Le digo que, de haber hecho lo que se le pedía, la intriga difícilmente habría prosperado. Laura concluye que, con tal de salir del arresto, creía “hasta en chamanes”.

Hablemos de otras temporadas, aquellas en que la imagen del Perú se convierte, para muchos, en chimuelos y polladas.
Te entiendo. Hago un giro en la TV porque saco lo más humilde, lo más pobre, cosas duras. Hay gente a la que le parece horrible y hay gente que sí está de acuerdo. Yo creo que el Perú es más que eso, es mucho más que las polladas, que son algo real, mucho más que los desmuelados, que son algo real. Ahora, yo hago ese programa acá en México y las historias son iguales.

¿Los talkshows tienen que ser de gente haciendo sus ajustes de cuentas?
Voy a hacer un cambio radical, voy a trabajar con las redes sociales y tengo contratada una gran plataforma. Ahí no te pueden mentir. Quiero sacar cosas como los héroes del día. Yo respeto a Ana María Polo [conductora de Caso cerrado], ahí que todo es recreado y ella lo dice.

Son actores que representan casos que ella dice que son reales. Tú quieres gente real que puede estar actuando.
Este proyecto es 100% real. Puedo admitir que en anteriores programas hubo sal y pimienta. Con las redes no necesito ni investigadores ni cuentos. El que no se renueva muere.

No debiste endosarle tu ráting a Montesinos.
No, no le he endosado nada a Montesinos ni mucho menos.

Quiero decir que tu generoso ráting debió quedarse en los límites de la televisión.
Ahí tienes razón. Nunca debí hacer comentarios sobre los temas políticos, nunca debí haber hablado de lo que había pasado con la subversión, nunca debí haberlo hecho, como nunca lo hago en México. He tenido el ráting de El Chavo del 8 y me quedo en Televisa porque es mi cadena hasta que me muera. Pero aprendí mi lección. ‘Una vez capan al gato’, decía mi madre.

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