
El caso del cardenal Juan Luis Cipriani, acusado de presunto abuso sexual a un menor en 1983, ha traído a colación el tema de los casos de violación sexual cometidos por miembros de la Iglesia Católica. Por eso, muchos se preguntan cómo se resuelven ese tipo de denuncias y ante qué instancias del Vaticano llegan los procesos.
El motivo del exilio de Cipriani Thorne, así como su alejamiento de la Iglesia católica, fue dada a conocer el fin de semana en un reportaje del diario El País de España. En el informe se indica que el Papa Francisco lo obligó, en 2019, a dejar el Perú tras recibir una carta de la presunta víctima, quien relató haber sufrido los abusos en el año 1983 durante el sacramento de la confesión, cuando tenía 16 años.
El diario El País detalló que, entre las sanciones impuestas a Cipriani, está la prohibición de portar hábitos y símbolos cardenalicios, hacer declaraciones públicas y participar en futuros cónclaves, pero esto último queda sin efecto debido a que él ya superó los 80 años, edad límite para asistir a esos eventos. Sin embargo, no se habría llevado a cabo un proceso canónico y el cardenal aceptó de manera voluntaria las medidas disciplinarias.
Sin embargo, Cipriani negó, a través de un comunicado, haber cometido algún abuso sexual y que no tuvo acceso a los detalles del caso ni fue escuchado en ningún proceso. “Quiero aclarar que los hechos que describen son completamente falsos. No he cometido ningún delito ni he abusado sexualmente de nadie ni en 1983, ni antes, ni después”, aseguró el cardenal.

Cipriani indicó que, en diciembre de 2019, el nuncio apostólico le comunicó verbalmente las medidas impuestas por la Congregación para la Doctrina de la Fe, incluida la solicitud de residir fuera del Perú. En 2020, tras una audiencia con el Papa Francisco, aseguró haber reanudado parcialmente su actividad pastoral, dedicándose a retiros espirituales y la administración de sacramentos.
El Vaticano confirmó que las sanciones disciplinarias impuestas al cardenal Juan Luis Cipriani, tras las acusaciones de abuso sexual, “siguen vigentes”, aunque se dieron algunos permisos.
“A raíz de las denuncias presentadas contra él, y tras la aceptación de su renuncia como arzobispo de Lima, se impuso al cardenal un precepto penal con ciertas medidas disciplinarias relativas a su actividad pública, lugar de residencia y uso de insignias, firmado y aceptado por su eminencia”, explicó a EFE el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni.
¿Cuáles son los plazos, procesos, mecanismos de descargos y sanciones en un caso de una denuncia de abuso sexual en la Iglesia católica?
La doctora Milagros Revilla, constitucionalista y canonista, explicó a El Comercio que, en diciembre del 2021, se realizó una modificación en el derecho canónico para que los procesos sobre abusos sexuales a menores cometidos en el interior de la Iglesia católica también incluyan a los laicos. Antes de eso, la medida solo alcanzaba a los sacerdotes.
“Antes de la reforma solamente se podía procesar por casos de abusos a los sacerdotes, pero ha habido una modificación en estos últimos años y también, por casos de abusos, se procesa, además de los sacerdotes, a los laicos”, expresó Revilla.
En ese contexto, precisó que el caso de Luis Figari, fundador del Sodalicio de Vida Cristiana, se resolvió por las normas anteriores hasta esta última reforma. Afirmó que muchos hechos sucedidos en ese tiempo propiciaron la modificación del derecho canónico.
Remarcó que los mecanismos para sancionar en la Iglesia católica a los que son denunciados por temas de abuso sexuales se conocen como procesos contra el sexto mandamiento.

“En la iglesia los procesos que tienen como trasfondo los abusos contra menores o contra adultos lo conoce la iglesia como procesos contra el sexto mandamiento, que tiene que ver con el ámbito sexual, ahí entran diferentes tipologías”, expresó.
Revilla también enfatizó que los plazos de prescripción de las denuncias sobre abusos en la Iglesia son más largos que los del derecho peruano. “Se sabe que las víctimas, sobre todo en un ámbito espiritual, no van a denunciar inmediatamente, en el caso de menores eso suele suceder. Los padres también toman conocimiento después”, puntualizó.
Además, precisó que el proceso sobre abuso sexual en la iglesia tiene dos tipos: proceso administrativo y proceso judicial. “Se recibe el caso de la denuncia en el tribunal del país donde se ha cometido el acto y el tribunal eclesiástico tiene que comunicar inmediatamente a Roma y enviar todo el expediente, pero el proceso no necesariamente es judicial, también puede ser administrativo y se resuelve en Roma”, aseveró.
Revilla explicó que en la Iglesia los procesos judiciales y administrativos, así como los expedientes de los casos, son “extremadamente reservados”. “Se le da a conocer al acusado no trasladándole todo el expediente sino que se le da a conocer de manera oral a través de comunicaciones puntuales para que la autoridad de la Iglesia tome conocimiento de ambas partes”, afirmó.
“El proceso contra los acusados de abuso contra menores es extremadamente reservado, tanto que el acusado siempre toma conocimiento, pero por aquello que le da a conocer la autoridad para que él dé sus descargos, pero no toma conocimiento del expediente”, añadió.
Indicó que la máxima sanción para un sacerdote en la Iglesia católica es la reducción al estado laical, mientras que para un laico es la expulsión o la prohibición de recibir los sacramentos o de participar en las actividades.
¿Cuál es el proceso para atender un caso de abuso sexual en la Iglesia católica?
El abogado especialista en derecho canónico Alberto González Cáceres explicó que en la iglesia católica existe un libro muy antiguo llamado el Código de Derecho Canónico, en el cual se establecen y se regulan asuntos relativos a los derechos y obligaciones de los laicos, de los fieles y de todos aquellos que están relacionados a la organización de la Iglesia.
En ese contexto, según explicó, el papa Juan Pablo II estableció, en abril del 2001, un mecanismo especial para atender los casos de abusos a través del documento denominado Motu Proprio y determina que las denuncias ya no serán vistas en los obispados o diócesis.
“Juan Pablo II crea, dentro del ámbito de su legislación, un documento que complementa el código para los casos de violaciones y abusos en general, abusos contra el sexto mandamiento, que implica no solamente actos de violación sexual y tocamientos”, expresó.

“Este documento es un Motu Proprio y recibe este nombre porque el Papa se dirige a toda la comunidad católica y, en su afán de legislar y regular, genera un documento regulatorio. Ese Motu Proprio tiene la finalidad de atender solamente y disponer que en cualquier diócesis de todo el mundo que ocurran denuncias por abuso ya no se pueden ver en sede local, es decir, en cada obispado o diócesis”, añadió Alberto González Cáceres.
Remarcó que, una vez llegada la denuncia a Roma, el Vaticano le indica a la Congregación para la Doctrina de la Fe que investigue y juzgue el caso. Dicha congregación puede dictar, como en el caso de Juan Luis Cipriani, medidas cautelares. Remarcó que, respecto a dicho cardenal, no habría un proceso y que eso se evidenciaría con la respuesta que dio tras conocerse el reportaje del diario El País.
“Una medida cautelar es una medida temporal, provisoria y de cumplimiento inmediato. Lo que sucede en la Iglesia es que las medidas cautelares se vuelven permanentes en el tiempo”, manifestó.
González Cáceres detalló que los tipos de sanciones que se aplican a los miembros de la Iglesia son las censuras, penas y remedios. Entre las penas están la orden de permanecer solamente en un lugar, así como la prohibición residir en una ciudad o de llevar títulos y honores, lo que implica no vestirse como cardenal u obispo y lucir como un sacerdote.
Otras medidas son las de no escuchar confesiones, ni dictar charlas y conferencias. Y por último está la expulsión del estado clerical, lo que implica que se le quiten las funciones de sacerdote y se vuelve un laico.
“Casos Cipriani y Sodalicio han golpeado mucho”, afirma obispo de Jaén
Monseñor Alfredo Vizcarra, obispo de Jaén, indicó que en la Conferencia Episcopal existe un Centro de Escucha para el Menor y la Mujer y la Comisión de Escucha para atender las denuncias de las víctimas de abusos sexuales por parte de miembros de la Iglesia.
“En la Conferencia Episcopal existe la oficina de escuchas para las víctimas, se ha creado esta oficina y estoy seguro que monseñor Pascual Rivera, con su equipo, estará dispuesto para acogerlos y recibirlos, sean las víctimas directas o las familias”, expresó en el programa “Del Hecho al Dicho”.
Vizcarra admitió que los casos del Sodalicio y del cardenal Juan Luis Cipriani han golpeado mucho a la iglesia peruana y pidió perdón a las víctimas por no haber atendido de manera adecuada las denuncias sobre abusos sexuales.

“Es sabido que tuvimos un encuentro el primer día de nuestra asamblea con monseñor Jordi Bartomeu (enviado por el Papa Francisco), escucharlo y ver la magnitud del problema del Sodalicio nos ha golpeado tremendamente a los obispos. Que se añada a esto (lo de Cipriani) es como que nos estuvieran dando nuevamente otro golpe. Esto ha sido muy fuerte, por eso es que en la comunicación hemos dicho que las palabras no han sido suficientes para expresar nuestro sentimiento ante las víctimas por no haber atendido como debíamos hacerlo, pero no hemos estado a la altura. Eso lo reconocemos y sí pedimos disculpas y perdón, lamentamos que haya sido así”, argumentó.
Respecto al caso de Juan Luis Cipriani, monseñor Vizcarra destacó que la denuncia haya sido acogida por el Vaticano, pero que no se sabe en qué parte de la investigación se han adoptado medidas contra el cardenal.
“En el caso del cardenal Juan Luis Cipriani, la denuncia ha sido presentada y acogida por el Vaticano, que ha considerado necesario, ante esta denuncia, dar las sanciones y se ha ratificado el Vaticano diciendo que ha habido una sanción a raíz de la denuncia”, aseveró el obispo de Jaén.
“No ha sido un rechazo a la denuncia, sino que ha sido acogida y por eso se le ha sancionado al cardenal con ese tipo de medidas, que es el exilio del país para tener que vivir en un país fuera del Perú, no vestirse con las insignias o los signos de cardenal, guardar silencio sobre estos asuntos y no tener apariciones públicas, pero recientemente el cardenal no ha respetado eso y ha estado acá (en el Perú) y ha tenido una aparición pública en la que ha sido condecorado”, añadió.
Arzobispo de Lima Carlos Castillo se pronuncia
Sin mencionar en ningún momento el nombre del cardenal Juan Luis Cipriani, quien es acusado de abuso sexual a un menor, el arzobispo de Lima y cardenal del Perú, Carlos Castillo, expresó su “decidido e irreversible apoyo” al Papa Francisco por “su sabio modo de ejercer la justicia en la Iglesia” y de acoger y proteger a las víctimas.
“Reconocemos y valoramos la enorme y esforzada labor que la Santa Sede y, en especial, el Santo Padre Francisco ha venido y viene realizando para prevenir, investigar y sancionar los delitos de abuso de conciencia, espiritual, sexual y de poder dentro de la iglesia. En ese sentido, tenemos plena confianza en los procedimientos e instrumentos canónicos penales que la Santa Sede ha utilizado, utiliza y aplica, los cuales han venido evolucionando y mejorado sostenidamente”, indicó Castillo en su pronunciamiento.
🚨 Comunicado del Arzobispo de Lima al Pueblo de Dios pic.twitter.com/MaXrEhJlHT
— Arzobispado de Lima (@arzolima) January 28, 2025
Castillo pidió a las personas a aceptar “la verdad de los hechos” y las decisiones tomadas por el Vaticano. “Dado que en los últimos meses, luego de serias y precisas investigaciones, existen personas e instituciones que se niegan a reconocer la verdad de los hechos y las decisiones tomadas por la Santa Sede, convocamos a todos a entrar en razón mediante un camino de conversión que implique abandonar las vanas justificaciones, el empecinamiento y el rechazo a la verdad, la cual, cuando es aceptada humildemente, nos hace libres a todos. Solo esto nos llevará a superar efectivamente la tragedia que vive nuestra Iglesia, especialmente las víctimas e, incluso también, los victimarios”, expresó el primado del Perú.
Conferencia Episcopal Peruana destaca decisión del papa Francisco en el caso del cardenal Juan Luis Cipriani
La Conferencia Episcopal Peruana destacó la decisión del papa Francisco de imponerle “limitaciones ministeriales” al cardenal Juan Luis Cipriani y de aceptar que deje su puesto de arzobispo emérito de Lima al cumplir sus 75 años, tras conocerse la denuncia de un presunto caso de abuso sexual a un menor.
“Reconocemos la sabia decisión del Santo Padre al unir en ella la justicia y la misericordia, de aceptar que deje el Ministerio Episcopal del arzobispo emérito de Lima al cumplir los 75 años, y de imponerle algunas limitaciones ministeriales”, expresó el grupo de obispos en un comunicado.
Compartimos el Comunicado de la Presidencia de la Conferencia Episcopal Peruana "La verdad les hará libres" (Juan 8,32). pic.twitter.com/fRmDlXAx7H
— Conferencia Episcopal Peruana (@conf_episcopal) January 29, 2025
Además, los obispos del Perú dijeron sentirse “apenados” por las recientes noticias del cardenal Juan Luis Cipriani y reafirmaron su “cercanía” a todas las víctimas de cualquier tipo de abuso.
“Lamentamos el dolor sufrido por la víctima de abusos y por la comunidad eclesial y pedimos a todo el pueblo de Dios que respete la voluntad de la víctima de permanecer en el anonimato”, manifestó.
“Pedimos a todo el pueblo de Dios que ofrezca oraciones por el denunciante, por el cardenal Juan Luis Cipriani y por la Iglesia para que sea espacio seguro, donde vivir la reconciliación”, agregó.