(Foto: Rolly Reyna / El Comercio)
(Foto: Rolly Reyna / El Comercio)
Ana Briceño

El juez Max Cirilo Diestra decidió ayer que Guillermo Riera, el empresario que el pasado 5 de mayo causó la muerte de tres jóvenes al atropellarlos en la Costa Verde, afronte su proceso en libertad.

El fallo causó indignación en los familiares de las víctimas. “El señor Riera mató a tres personas y dejó herido a un joven en plena pista. Se fugó del país. No entendemos por qué este juez le dijo que se vaya a su casa”, sostuvo ayer a este Diario Milagros Rivera, madre de Luis Valdés, de 23 años, uno de los fallecidos.

El 4 de mayo, a las 7 p.m., Riera llegó en una camioneta al Lima Marina Club, en la Costa Verde. Permaneció allí hasta pasada la medianoche. No se sabe si bebió licor en ese lugar.

A la 1:50 a.m., a la altura de la playa Los Yuyos (Barranco), Riera perdió el control de su vehículo, invadió el carril contrario y atropelló a cuatro jóvenes que manejaban motocicletas. Tres murieron en el lugar. El cuarto sobrevivió aunque quedó tendido en la pista desangrándose.

Riera no ayudó a las víctimas. Tomó un taxi y huyó. Horas después, compró un pasaje a Miami, Estados Unidos, y se fue del Perú. Las cámaras del aeropuerto lo grabaron cuando besaba su pasaporte tras pasar los controles migratorios. Un empleado suyo intentó asumir la responsabilidad del accidente, pero ante las evidencias se retractó.

Cuando Riera llegó a Lima para ponerse a derecho –12 días después del accidente–, declaró al Ministerio Público que se había fugado porque “estaba en shock”. Nunca pasó el dosaje etílico.

Para la fiscalía, Riera condujo a excesiva velocidad, según los peritajes. El empresario ha alegado que nunca vio las motocicletas. La semana pasada, la fiscalía pidió 12 años de prisión para él.

—¿Cambio de opinión?—
El 25 de mayo, el juez Max Cirilo dictó nueve meses de prisión preventiva para Riera por los presuntos delitos de homicidio culposo agravado, lesiones culposas agravadas y omisión de socorro y exposición al peligro. Además, por el delito contra la administración pública, en la modalidad de fuga del lugar del accidente de tránsito.
Ese mismo día, el empresario fue trasladado al penal de Lurigancho.

Sin embargo, ayer el mismo juez dispuso que afronte el proceso judicial en libertad. Según los argumentos del magistrado, “no hay peligro de fuga” y “está acreditado su arraigo familiar y laboral”. “Se acredita la existencia de un vínculo conyugal y familiar, así como la atención que debe prestar como jefe de familia frente a sus hijos”, se lee en la resolución. Un elemento que acredita el arraigo laboral de Riera, según Cirilo, es la escritura de la empresa Guillermo Riera Iluminación Profesional E.I.R.L., donde trabajaba.

Otro elemento que consideró el juez es que Riera transfirió dinero a las víctimas. “Ya no resulta razonable continuar con la prisión preventiva, se le debe cesar por una comparecencia con restricciones”, dice el documento. También se le ordena pagar una caución de S/150 mil, que deberá abonar en los próximos días. El fiscal Alindor Astocóndor apeló la decisión del juez Cirilo de dictar comparecencia restringida.

Fernando Silva, abogado de Riera, dijo que el empresario saldrá mañana del penal. Agregó que tiene impedimento para abandonar el país.

Según el penalista Roberto Miranda, Riera “eludió la justicia y perturbó la actividad probatoria desde un inicio”. “El peligro procesal que él cometió cuando fugó no puede desaparecer de un día para otro”, precisó.

LEE TAMBIÉN...

Contenido sugerido

Contenido GEC