El testigo y el testimonio que mantienen preso a Manuel Burga
El testigo y el testimonio que mantienen preso a Manuel Burga
Martín Acosta González

Alejandro Burzaco es el nombre de uno de los “testigos confidenciales” del caso de corrupción de la FIFA y quizá el principal responsable de que pase sus días en el penal de Ancón II. Su testimonio ha sido clave para revelar los millonarios pagos que hacía la empresa Datisa a miembros de la Conmebol para así, a través de sobornos, hacerse con los derechos de transmisión y publicidad de torneos como la Copa América, Copa Libertadores y Copa Sudamericana, por citar algunos casos. 

Burzaco fue el presidente del directorio de la empresa Torneos y Competencias y también formó parte de Datisa. Tras permanecer prófugo por más de 13 días, se entregó a la justicia estadounidense en junio de 2015. Aceptó pagar 20 millones de dólares de fianza y devolver más de 21 millones de dólares. Desde su arresto domiciliario en Nueva York, el empresario argentino se convirtió en colaborador de la Fiscalía de EE.UU. y testigo de cargo en este caso.

Es precisamente el testimonio de Burzaco y los documentos presentados por este, los que han permitido la caída de los ex presidentes de las federaciones de la Conmebol y de los directivos de esta, entre ellos Manuel Burga, ex presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).

En su declaración de 36 páginas, Burzaco señaló a la Fiscalía de EE.UU. que cumplió "un papel activo en el esquema de sobornos" y admitió haber pagado "decenas de millones de dólares" a dirigentes de la Conmebol y la FIFA por más de 10 años.

Burzaco detalló que realizó pagos de un millón de dólares anuales a los presidentes de las federaciones de la Conmebol por derechos de transmisión y publicidad de la Copa Libertadores. Concretamente a Manuel Burga desde el 2009. 

En su testimonio también narra que en mayo del 2013, se firmó en Londres el contrato entre Datisa y Conmebol, teniendo a Manuel Burga entre los firmantes, para pagar US$317,5 millones por los derechos de márketing de la Copa América para sus ediciones de 2015, 2016, 2019 y 2023. Además, de un “bono” de US$100 millones para los 10 presidentes de Conmebol. 

Las revelaciones de Burzaco han colocado a todos los directivos de la Conmebol contra las cuerdas. Sin embargo, esta no sería la única prueba de la Fiscalía de Estados Unidos. Según pudo conocer El Comercio, los testimonios de Hugo Jinkis y Mariano Jinkis, directivos de la empresa de marketing deportivo Full Play Group SA. y que eran parte de Datisa, también comprometen a quienes fueron cabeza del fútbol sudamericano.

Si bien la Fiscalía de EE.UU. desclasificó parte de la declaración del empresario, también dispuso que ciertas partes permanezcan bajo secreto de sumario. Son precisamente esas partes reservadas las que ayudarían a aclarar detalles importantes respecto al lugar donde iban a parar los millonarios pagos hechos por Datisa. Burzaco no ha aclarado, al menos por ahora, si el dinero que aparentemente recibió Manuel Burga ingresó a una cuenta personal, a una cuenta de terceros o a través de un depósito especial a la FPF. 

Manuel Burga, que se encuentra recluido en el penal Ancón II desde diciembre de 2015, ha negado haber recibido los sobornos y ha indicado que todo el dinero por derechos de transmisión y publicidad fue transferido desde las cuentas de la Conmebol a las arcas de la Federación Peruana de Fútbol (FPF). 

Sin embargo, según la auditoría realizada a las cuentas de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) durante los años 2013 y 2014 y que fue presentada en enero pasado, estos depósitos no son visibles en las cuentas de la FPF ni tampoco otras aportaciones fuera de las normales que recibía de la Conmebol. En opinión del abogado Erickson Ramos, que representa a EE.UU. en la proceso de extradición, esa auditoría contradice la versión dada por Manuel Burga.

EN LA RECTA FINAL
Mientras la investigación en contra de los directivos de la FIFA se desarrolla en Estados Unidos, el futuro inmediato de Manuel Burga se decidirá el miércoles 25 de mayo. El pedido de extradición presentado por la Justicia de Estados Unidos es evaluado en estos momentos por la Corte Suprema y en menos de una semana se sabrá si el ex presidente de la FPF es liberado o efectivamente será procesado, al igual que los otros directivos de la Conmebol, por estar implicado en el escándalo de corrupción de la FIFA.

El primer pedido de extradición fue devuelto por la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema, presidida por Javier Villa Stein, debido a que esta carpeta no contaba algunos requisitos establecidos en el Tratado de Extradición entre EE.UU. y Perú. Por ello solicitaron a Estados Unidos adjuntar, básicamente las pruebas que incriminen a Manuel Burga. 

El Comercio accedió a la declaración suplementaria que sustenta la solicitud de extradición contra Manuel Burga y en ella, la fiscal auxiliar para el Distrito Este de Nueva York, Tanya Hajjar, reitera las acusaciones contra el ex presidente de la FPF y sostiene que existe suficiente documentación y testimonios con los cuales EE.UU. probará la culpabilidad de Burga. 

Sin embargo, las pruebas a las que hace referencia la fiscalía de EE.UU. y que fueron solicitadas por la Corte Suprema no fueron adjuntadas. La fiscal Tanya Hajjar sostiene en su declaración jurada que “cuando se aprueba la acusación formal, las acusaciones del gran jurado son secretas y se impide a los abogados para el gobierno revelar los hechos que ocurren ante el gran jurado, incluyendo la presentación de pruebas y el testimonio de testigos”. 

Para César Nakazaki, abogado de Manuel Burga, el tratado entre EE.UU. y Perú obliga a ambos gobiernos a presentar las pruebas para proceder a una extradición. “En la legislación de Estados Unidos las pruebas podrán ser secretas pero para este caso deben presentarse sí o sí”, señaló a El Comercio.

¿CAMINO A LA LIBERTAD?
El abogado Erickson Ramos insiste que en la Corte Suprema tendrá que admitir, de todas maneras, la demanda de extradición, con lo cual Manuel Burga llegaría a EE.UU. en calidad de detenido. “Acá no se está probando la culpabilidad de Burga, acá solo se está viendo su extradición. Recién en EE.UU. se verá si es culpable y tendrá derecho a defenderse”, dijo a El Comercio.

Por su parte Nakazaki señala que Burga está preso de manera inconstitucional y que su defendido debió salir en libertad tras la devolución del primer pedido de extradición el pasado 14 de marzo. “Al no haber presentado las pruebas que la Corte Suprema solicitó, hay dos posibilidades: que la demanda de extradición se declare infundada o improcedente, en cualquiera de los dos casos Manuel Burga sale en libertad”.

Para el abogado Roberto Pereyra, en los casos de extradición se exige una imputación necesaria y que dé cuenta de la responsabilidad del procesado. “Lo que le dice la Fiscalía de EE.UU. al Estado Peruano es ‘Haz un acto de fe porque no puedo darte las evidencias’”.

Si la demanda de extradición se admite el caso pasará a la Presidencia del Consejo de Ministros para la firma del presidente de la República. Recién ahí Manuel Burga podrá viajar a Estados Unidos. Si esta se rechaza Burga saldría libre como máximo en cinco días.

El temor de la Fiscalía de Estados Unidos gira en torno a una posible fuga de Manuel Burga, algo que ha sido negado por su defensa. “Él (Burga) quiere presentarse ante el gran jurado pero no con el cargo de culpable”. Nakazaki también indicó que el ex presidente de la FPF no está dispuesto a pagar las millonarias fianzas que la Justicia de Estados Unidos les ha pedido a otros presidentes de federaciones. 

Hoy por hoy, la extradición de Manuel Burga parece poco probable. Y aunque para el ex presidente de la FPF dejar la prisión es sin duda motivo de satisfacción, en EE.UU. el proceso en su contra continuará. Entonces ahí, Burga tendrá que probar que no participó en los fraudes y sobornos de los cuales se le acusa; y que los millones de dólares que pagó Datisa, nunca llegaron a sus bolsillos.

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