'Jardín del Edén' obra de la portuguesa Joana Vasconcelos del pabellón luso en la 56ª Bienal de Arte de Venecia, Italia, en 2015 (Foto: EFE)
'Jardín del Edén' obra de la portuguesa Joana Vasconcelos del pabellón luso en la 56ª Bienal de Arte de Venecia, Italia, en 2015 (Foto: EFE)
Juan Carlos Fangacio

Como no había pasado nunca antes, ni tampoco en ningún otro país, la participación peruana en las en Venecia se proyecta en el tiempo. Con la presencia asegurada hasta el 2034, cada año el trabajo es perfectible y busca superar la valla de la edición anterior. Y eso incluye discrepancias, polémicas o errores a subsanar. No hay misterio en ello: los tropiezos también son saludables.

Eso se observó en el conversatorio del último jueves que organizaron el Patronato Cultural del Perú –ente a cargo de organizar las participaciones en las bienales– y el Ministerio de Cultura. Sabroso intercambio de propuestas y puntos de vista que contó con la participación de las instituciones que respaldarán la representación local en la Bienal de Arte del 2019: asistieron patrocinadores como la Fundación Wiese y El Comercio, museos, asociaciones, universidades y también escuelas.

En la reunión se discutieron las bases para la postulación de los proyectos curatoriales. Se definió, por ejemplo, que el jurado estará integrado por cinco miembros: el comisario del pabellón peruano, Armando Andrade; un curador de alguna de las ediciones anteriores; un representante de la Asociación de Curadores del Perú; dos representantes académicos (de instituciones como la Escuela de Bellas Artes, la PUCP, Corriente Alterna y Centro de la Imagen); un representante elegido entre museos como el MALI, MAC, MATE y el Museo de Arte San Marcos; y un invitado extranjero.

Y aunque se dejó en claro que los proyectos deberán responder a los lineamientos que próximamente anunciará el curador general de la bienal (para esta edición, el crítico de arte estadounidense Ralph Rugoff), se dejó en claro que "sí se pueden tomar decisiones al margen del mandato curatorial", como señaló Marco Aveggio, vicepresidente del Patronato Cultural. En el arte, la flexibilidad es la regla.

EL PROCESO
Otro hincapié: que la Bienal de Venecia no solo sea entendida como un gran evento internacional, sino como una oportunidad para generar una fotografía del imaginario artístico actual del Perú.

"Venecia debe ser un pretexto para traer de regreso la exposición a nuestro país", señaló Andrade sobre el compromiso de montar en Lima, un año después, una réplica de lo exhibido en la ciudad de los canales.

Por ahora, el proceso sigue en desarrollo: los organizadores del concurso se comprometieron a realizar todas las reuniones necesarias para absolver dudas y perfilar mejor su plan comunicativo. Las bases están en línea y el plazo máximo para presentar postulaciones vence el 10 de setiembre. Hacia la primera semana de octubre ya se tendrá elegida la propuesta ganadora.

LAS BASES
Cómo participar en la Bienal de Venecia
Las inscripciones ya están abiertas en la página web del Patronato Cultural del Perú y la del Ministerio de Cultura.

La fecha límite para el envío de proyectos curatoriales vence el próximo 10 de setiembre.

La 58a Bienal de Arte de Venecia se celebrará entre el 11 de mayo y el 24 de noviembre del 2019.

Las bases, fichas de inscripción y planos del pabellón peruano pueden encontrarse en www.pcp.org.pe. Las propuestas completas deberán ser enviadas al correo: info@pcp.org.pe.

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