Manuel Landeta, Lisardo, Pablo Monsar y Agustín Arana dan vida a "Caballeros cantan". (Foto: Difusión)
Manuel Landeta, Lisardo, Pablo Monsar y Agustín Arana dan vida a "Caballeros cantan". (Foto: Difusión)
Ángel Navarro Quevedo

Basta con recordar series como “Rubí”, “La Usurpadora”, “Simplemente María” o “La Fea Más Bella” para evocar la figura del . Un personaje que marcó tendencias y los gustos de más de una generación con su carisma y porte. Agrupando a diversos actores que encajaron en ese perfil, llega al Auditorio Miletón Carbajal el espectáculo “Caballeros Cantan”, donde actores mexicanos como Manuel Landeta, Lisardo, Chao, Agustín Arana y Pablo Montero muestran una faceta presente en sus vidas, pero poco conocida por su público.

“Hicimos esto porque no queríamos encasillarnos solo en el rol de galán o como actores de novela. Queríamos sentirnos como peces en el agua y hacer lo que nos gusta más allá de los roles planteados”, revela Agustín Arana, quien, antes de ser uno de los galanes de la telenovela “Betty La Fea”, fue compositor musical e integrante de la banda Garibaldi.

Agustín Arana comenzaría su carrera profesional cuando se integró a la nueva generación del grupo musical Garibaldi, donde permaneció por seis años. No sería hasta el 2002, cuando le llega su primera oportunidad como actor, con la telenovela infantil Cómplices al rescate, en la cual interpreta a Rodolfo García. (Foto: Caballeros Cantan)
Agustín Arana comenzaría su carrera profesional cuando se integró a la nueva generación del grupo musical Garibaldi, donde permaneció por seis años. No sería hasta el 2002, cuando le llega su primera oportunidad como actor, con la telenovela infantil Cómplices al rescate, en la cual interpreta a Rodolfo García. (Foto: Caballeros Cantan)
/ CARLOS ZAVALA

Tras consolidarse en la industria del entretenimiento, surgió la idea de formar un ensamble musical de hombres. Sin embargo, la falta de apoyo de las disqueras retrasó el proyecto, que estuvo a punto de desaparecer. Fue gracias al impulso de otros colegas que Arana decidió retomar esta iniciativa.

“Llamé a amigos actores que también fueran músicos, y así empezó el proyecto. Lo complicado es que todos estamos ocupados con otros trabajos. Coordinar ensayos y grabaciones en estudio fue un reto, pero el resto es simple porque la pasión está ahí”, nos cuenta Arana.

Otro tipo de galán

La noción de galán en el cine y la televisión mexicanos ha cambiado drásticamente con el tiempo. Durante las décadas de 1930 a 1950, la Época de Oro del cine mexicano, esta figura representaba la fortaleza física, los rasgos marcados y la imagen del héroe romántico. Actores como Pedro Infante y Jorge Negrete encarnaron este estereotipo, personificando los valores tradicionales de masculinidad de la época.

Con el paso de los años, las expectativas en torno al galán se transformaron. La globalización, la evolución de los estándares de belleza y los movimientos culturales contribuyeron a este cambio. Los galanes del nuevo milenio dejaron atrás el molde del hombre rudo para adoptar características más cercanas, tanto en lo físico como en lo emocional.

“Independientemente del papel, un galán puede ser un héroe, un amante, un sacerdote, un papá, un esposo o incluso un villano. Es la versatilidad del caballero más allá de la galantería”, explica Arana, dando un nuevo significado al término.

En lugar de héroes inalcanzables, ahora los galanes son figuras con las que el público puede identificarse, mostrando vulnerabilidad y empatía. Incluso, la tendencia apunta a facciones más finas, al estilo coreano, con moda vanguardista y complexión delgada, en contraste con los cuerpos tonificados que eran el estándar de los galanes de las telenovelas tradicionales

A pesar de la evolución, y sin abandonar la esencia de aquellos personajes que los hicieron famosos, los cinco galanes no solo celebran la música y la actuación, sino también su capacidad para reinventarse y conectar con el público de formas nuevas y emocionantes. Este espectáculo mezcla nostalgia y talento, reafirmando que los galanes mexicanos aún tienen mucho que ofrecer.

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