FRANCISCO MELGAR WONG

Después de una iniciativa nacida en el Facebook, en la que buscó congregar a la gente necesaria para hacer factible su llegada, Andrew Bird tocará en Lima. El cantautor estadounidense, uno de los más eclécticos de los últimos tiempos, llega después del lanzamiento de “Hands of Glory”, un disco de estilo más convencional y apegado al folk urbano de los años 70. “Es cierto, no es lo que suelo presentar como mi producción más creativa”, dice. “Pero ya he hecho diez discos y creo que en este punto de mi carrera tengo derecho a hacer lo que me provoque. Y eso es lo que sentí que debía hacer en ese momento”.

A lo largo de varios discos tu música me pareció un intento de lograr una convergencia entre la música seria y la música popular. ¿Lo sientes así? Creo que esa es una buena forma de decirlo. Sí. Llevo esa tensión en mí. Fui educado con música seria. Luego encontré a los Squirrel Nut Zippers y acabé metiéndome cada vez más en el pop, creo que esa fue una buena educación para mí.

Cuando eras más joven dijiste que el indie rock te aburría Sí. Mucho del indie rock me resultaba aburrido y repetitivo. Quizá gran parte de lo que se hizo en esa época era más profundo de lo que yo podía ver y requería más paciencia de mi parte, como Yo La Tengo, por ejemplo. Hay algo ‘cool’ en tocar en el límite de tus habilidades técnicas, pero a veces lo único que quieres es tocar dos notas y punto. Me di cuenta de que se pueden decir más cosas con menos notas. De todas formas, la repetición es difícil de digerir para mí. Pero me gusta lo concisa que puede llegar a ser la música pop.

En el pasado te llamaste a ti mismo ‘silbador profesional’. ¿Qué significa eso? Es una broma. Silbar es algo que uno hace en la ducha. Convertir algo así en una profesión me parece una broma.

¿Más allá de lo ridículo que pueda ser profesionalizar el silbar, crees que es algo risible el que la gente quiera profesionalizar su arte? Creo que el hecho de que Internet permita a muchas bandas hacerse conocidas es algo que tiene un lado positivo y un lado no tan positivo. Creo que lo bueno es que muchos músicos están logrando vivir de una forma decente y cada vez menos se están haciendo obscenamente ricos. Ese es un cambio para mejor. Lo malo es que más bandas independientes se vuelven profesionales. Y eso no es algo bueno. Se están volviendo más pulidas y eso me aburre.

Lee la entrevista completa en la edición impresa de Luces.

EL DATO Andrew Bird se presentará en Lima este 27 de febrero. El show se llevará a cabo en el Toro Bar (Jr. Salaverry 143, Barranco). Los boletos están a la venta en Tu Entrada de Plaza Vea y Vivanda.