El estudiante del colegio Franklin Delano Roosevelt, Vicente Moreyra, ganó el concurso Local Letters for Global Change del Pulitzer Center en la categoría Clima y Medio Ambiente. (Foto: Difusión)
El estudiante del colegio Franklin Delano Roosevelt, Vicente Moreyra, ganó el concurso Local Letters for Global Change del Pulitzer Center en la categoría Clima y Medio Ambiente. (Foto: Difusión)
Ángel Navarro Quevedo

La digitalidad devoró las en papel. Con ellas, desapareció el gesto de escribir a mano una sugerencia pertinente o compartir la intimidad de la vida en unos párrafos. Sin embargo, incluso en su versión digital, una carta aún requiere una cuota de esperanza, la misma que sostiene a quien aguarda paciente la respuesta del destinatario.

Ahí reside la promesa implícita en el acto de enviarla: la posibilidad de ser leído, de provocar una respuesta o, al menos, de dejar constancia de la intención de diálogo. Por eso, su estructura conserva un aire caballeresco, iniciando con un “querido” o “estimado”, para luego elegir con cuidado las palabras, el tono y el orden de las sentencias que la conforman. Es, en esencia, un gesto de voluntad cuyo destino más frecuente es perderse en una bandeja de entrada atiborrada de publicidad, ofertas de viaje y, de cuando en cuando, algún asunto de carácter urgente.

Aun sabiendo el incierto destino de sus palabras, el estudiante Vicente Moreyra escribió una carta. Sin otra pretensión que seguir el consejo de su profesor y responder a la invitación del Pulitzer Center, que animaba a los jóvenes del mundo. “Estimados estudiantes: Hagan oír su voz este otoño”. Todo comenzó con la lectura de un artículo del propio Pulitzer—requisito para escribir la carta—titulado “El gigante de los snacks PepsiCo obtuvo aceite de palma de tierras indígenas arrasadas”, firmado por Elisângela Mendonça, Andrew Wasley y Aramís Castro.

A la par, también comenzaron las noches de lectura, los hipervínculos seguidos por otros que lo adentraban cada vez más en una problemática persistente y que, con el paso de los días, se convirtió en una titánica entidad abstracta que debía comprender para escribir sobre ella, así como evitar dejarse arrastrar por la indignación propia del primer contacto con ese Perú desconocido.

Un extracto de la carta realizada por Vicente Moreyra como parte del concurso Local Letters for Global Change 2024 del Pulitzer Center
Un extracto de la carta realizada por Vicente Moreyra como parte del concurso Local Letters for Global Change 2024 del Pulitzer Center

“Cada día era ver algo nuevo, algo que se extendía más allá del límite de la entrega. Al mismo tiempo, era impactante ver cómo teníamos las tasas más altas de deforestación desde que comenzó el siglo XXI, aun no entiendo porque esas cifras no causan mayor alarma”, menciona Moreyra, quien, tras la lectura e investigación, debía elegir un destinatario.

Banner Event Special

Ese destinatario fue el presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, a quien, en 537 palabras ordenadas en seis párrafos, exhortó a hacer uso de su poder y recordar su responsabilidad con uno de los mayores bastiones ecológicos del mundo. También le propuso, guiado por algunos artículos, a seguir el modelo empleado por Guyana para combatir la deforestación: otorgar tierras a los pueblos indígenas, establecer sistemas de verificación para la tala y fomentar la silvicultura sostenible.

Fueron 1 200 las cartas enviadas por estudiantes de todo el mundo, pero solo la de Moreyra obtuvo el reconocimiento del Pulitzer Center en la categoría Clima y Medio Ambiente. Un logro que invita a reflexionar, una vez más, sobre los problemas que conviven con los peruanos y sobre la importancia de enviar cartas que, aunque no lleguen al puerto deseado, en algún buen lugar han de atracar.

La carta se terminó de escribir una hora antes del tiempo límite para su entrega, una ventaja de la era digital, donde enviar mensajes a presidentes, primeros ministros o reyes ya no es una idea descabellada. Aunque es inevitable preguntarse: ¿quiénes más podrán leerla? Cualquiera que sea el destino de la carta o de Vicente Moreyra, el acto de enviar un mensaje es, en sí mismo, una declaración de intenciones: “Cuando uno escribe es porque quiere cambiar algo”, sentencia

Sobre el premio
Pulitzer Center Letter Writing Contest

El Pulitzer Center Letter Writing Contest es un concurso global dirigido a estudiantes, organizado por el Pulitzer Center on Crisis Reporting. A diferencia del prestigioso Pulitzer Prize, que premia a periodistas profesionales, este certamen reconoce cartas escritas por estudiantes sobre clima y medio ambiente, salud mental, derechos humanos, información e inteligencia artificial y paz y conflictos. 




Contenido sugerido

Contenido GEC