Stephenie Taylor, una mujer británica de 33 años, se convirtió en madre por segunda vez gracias a la donación anónima de esperma de un hombre al que conoció por una app. Ella consiguió salir embarazada inseminándose con la ayuda de un kit que compró en eBay y viendo videos tutoriales en el portal YouTube.
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Se trata de Stephenie Taylor, de 33 años, una mujer de Nunthorpe, Middlesbrough, que quería convertirse en madre por segunda vez, pero no tenía pareja ni medios económicos para costear un tratamiento de fertilidad. Fue así como decidió acudir a la aplicación Just A Baby, una plataforma similar a Tinder en donde se pueden encontrar donantes de espermas, quienes son llamados “socios de concepción”.
Mediante este aplicativo, Stephenie buscó las características del hombre que quería como donante: alguien que fuera familiar, sin antecedentes de enfermedades graves y que se pareciera físicamente a ella. En poco tiempo, encontró a alguien que cumplía sus requisitos y, tras tres semanas de conversaciones, quedaron en enero del año pasado para hacer la entrega de la muestra de semen.
El hombre llegó a su hogar con el recipiente de esperma y “fue amable, cariñoso y simpático”. “Nos tomamos una taza de té y charlamos sobre el tiempo”, contó la mujer en conversación con el medio local TeessideLive.
El siguiente paso era inseminarse, y para ello Stephanie compró en la tienda virtual eBay un kit de inseminación y tuvo que ver varios tutoriales en Youtube para saber cómo debía proceder. La mujer se quedó embarazada en el primer intento y dio a luz a una niña, cumpliendo así su sueño de convertirse en madre nuevamente y dar un hermanito a su hijo.
“Es un milagro”, comentó Stephanie, bastante orgullosa mientras sostiene en brazos a la pequeña Eden, quien cumplirá un año en el mes de octubre. “Es realmente un bebé online”, bromeó.
Su familia aceptó a la niña con mucha alegría y todos están de acuerdo que ha sido una “decisión brillante”. El donante también está al tanto, e incluso comentó de manera anónima que lo haría otra vez. Además, estará encantado de conocer a la “benefactora de ADN” cuando sea mayor de edad.
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