Todavía no se sabe si Elon Musk aceptará la invitación (Foto: AFP)
Todavía no se sabe si Elon Musk aceptará la invitación (Foto: AFP)

Cuando decide alzar la voz —o en este caso, hacer un simple retuit—, el efecto dominó es inevitable. Esta vez, el CEO de Tesla puso en entredicho una de las promesas más audaces de la industria automotriz china: el increíble coeficiente aerodinámico del nuevo sedán eléctrico Avatr 12. Lo que parecía una campaña de lanzamiento impecable se transformó en una disputa global que enfrenta a dos gigantes tecnológicos con ambiciones cruzadas.

LA PRUEBA QUE ENCENDIÓ LA CHISPA

Todo comenzó cuando Ray4Tesla, un reconocido influencer chino especializado en vehículos eléctricos, compartió un video donde cuestionaba los datos oficiales de resistencia al aire del Avatr 12. El modelo aseguraba tener un coeficiente de solo 0.21, una cifra que lo colocaría entre los más eficientes del mundo. Sin embargo, la prueba independiente arrojó un sorpresivo 0.2818, lo cual encendió las alarmas entre expertos y entusiastas.

El verdadero incendio comenzó cuando Elon Musk retuiteó el video sin añadir palabra alguna. Ese gesto, aparentemente inofensivo, fue interpretado como una burla hacia el fabricante chino, y no tardó en viralizarse. El mensaje era claro: el hombre detrás de Tesla dudaba públicamente de las cifras del Avatr 12. En cuestión de horas, la tensión creció como una tormenta digital.

El multimillonario Elon Musk está al mando del Departamento de Eficiencia Gubernamental (Foto: AFP)
El multimillonario Elon Musk está al mando del Departamento de Eficiencia Gubernamental (Foto: AFP)
/ SAUL LOEB

¿CUÁL FUE LA REACCIÓN DE AVATR?

Lejos de quedarse en silencio, Avatr respondió con elegancia y desafío. A través de sus redes oficiales, la empresa no solo defendió la validez de sus datos, sino que anunció una prueba oficial en túnel de viento para el 12 de abril. En un movimiento audaz, incluso invitaron públicamente a Elon Musk a presenciar el ensayo. “Lo esperamos con los brazos abiertos”, afirmaron en un comunicado que rápidamente ganó atención en medios internacionales.

Pero ¿quién está detrás del Avatr 12? Este lujoso sedán eléctrico no es un proyecto cualquiera. Nació de la colaboración entre tres pesos pesados de la tecnología y la movilidad en China: Changan (automotriz estatal), Huawei (sistemas inteligentes) y CATL (líder mundial en baterías). Su diseño elegante, motores duales con 580 caballos de fuerza y una autonomía de hasta 650 km apuntan directo al segmento de lujo, donde compite con Tesla Model S y Mercedes EQE.

La controversia, sin embargo, no gira solo en torno a cifras técnicas. Se trata de una lucha simbólica entre el liderazgo de Tesla y el ascenso de una industria automotriz china que ya no solo quiere ser competitiva, sino dominadora. La precisión en un número como el coeficiente aerodinámico se vuelve entonces una cuestión de credibilidad nacional e ingeniería de prestigio global.

Mientras Musk guarda silencio, el video original de Ray4Tesla ha desaparecido misteriosamente de las plataformas chinas, aunque el autor asegura que no fue él quien lo retiró. En paralelo, Avatr insiste en su transparencia y ha reiterado su disposición a mostrar al mundo la validez de sus pruebas. Todo apunta a una tensión diplomática entre innovación, marketing y poder tecnológico.

El Avatr 12 fue presentado el pasado 25 de marzo como una de las apuestas más ambiciosas del mercado automotriz chino (Foto: AP)
El Avatr 12 fue presentado el pasado 25 de marzo como una de las apuestas más ambiciosas del mercado automotriz chino (Foto: AP)

¿ELON MUSK IRÁ A CHINA?

¿Aceptará Elon Musk la invitación? Los analistas creen que es poco probable, aunque con el empresario sudafricano-estadounidense nunca se sabe. Lo cierto es que su gesto ya puso en tela de juicio el producto estrella de una marca emergente, y obligó a esta a responder no solo con cifras, sino con una declaración de confianza en su ingeniería.

En medio del revuelo, el Avatr 12 sigue en el mercado. Las 700 unidades previstas para el mercado chino han comenzado a venderse con buena respuesta, según fuentes internas. Y aunque la polémica por su aerodinámica sigue al rojo vivo, hay algo claro: el sedán chino ya logró lo que toda marca sueña —que todo el mundo hable de él.

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SOBRE EL AUTOR

Periodista con experiencia en redacción y creación de contenido digital. Soy licenciado de la Universidad Jaime Bausate y Meza. Trabajé en medios de comunicación y agencias de marketing. Experiencia también como fotógrafo en campos deportivos.

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