
A medida que las políticas migratorias en Estados Unidos se vuelven más estrictas, muchos inmigrantes enfrentan una creciente preocupación: ¿podrían los datos proporcionados al gobierno ser utilizados en su contra? Esta inquietud ha ganado relevancia tras la intensificación de la aplicación de las leyes de inmigración bajo la administración de Donald Trump. Sin embargo, existe un estado que no pregunta por tu estatus migratorio cuando solicitas la licencia de conducir ni comparte fácilmente tu información personal.
Se trata de Minnesota. Esta medida representa no solo un alivio para quienes necesitan movilidad, sino también un reconocimiento de su contribución a la comunidad. Pero el temor de que los datos sean utilizados para identificarlos y deportarlos persiste. ¿Hasta qué punto están protegidos los datos personales de las personas?

“NECESITARÍAMOS UNA ÓRDEN JUDICIAL EMITIDA POR UN JUEZ”
Erin Johnson, portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Minnesota (DPS), asegura que el Departamento de Servicios para Conductores y Vehículos (DVS) no pregunta sobre el estatus migratorio de los solicitantes ni mantiene registros que identifiquen a alguien como indocumentado.
Esto significa que obtener una licencia no debería poner en riesgo a quienes se encuentran en situación irregular. Además, el departamento no ha recibido solicitudes de información por parte de las autoridades de inmigración.
“Si recibiésemos una solicitud de datos para esto, necesitaríamos una orden de allanamiento válida o una orden judicial emitida por un juez estatal o federal”, dijo Erin Johnson. Este requisito legal ofrece una capa adicional de protección para los inmigrantes.

LA CAMPAÑA QUE FUE DECISIVA
La campaña “Licencias de Conducir para Todos” fue fundamental para garantizar estas protecciones. Los defensores de la medida anticiparon posibles intentos de usar datos de licencias para identificar a personas indocumentadas, y por ello incluyeron salvaguardas en la ley.
Entre ellas, se eliminó el requisito de demostrar presencia legal en EE. UU., lo que permite a los solicitantes utilizar una amplia gama de documentos de identificación, como pasaportes internacionales válidos o declaraciones de impuestos estadounidenses.
Jody-Kay Peterson, directora del programa de servicios para conductores del DPS, reafirmó este compromiso asegurando que “DVS no enviará ningún nombre ni ninguna información personal a ninguna agencia de inmigración para su deportación”. Este mensaje busca calmar los temores y fomentar la confianza en el sistema.

Periodista con experiencia en redacción y creación de contenido digital. Soy licenciado de la Universidad Jaime Bausate y Meza. Trabajé en medios de comunicación y agencias de marketing. Experiencia también como fotógrafo en campos deportivos.