Recibido por cientos de hinchas, el goleador peruano Paolo Guerrero dijo este martes que se encuentra triste pero que ha llegado a Lima para dar la cara, tras el fallo del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que el pasado lunes amplió a 14 meses su sanción por dopaje, dejándolo fuera del Mundial de Rusia 2018.
“Estoy triste, pero vine a aquí a mostrar la cara, ya que se especulaban muchas cosas de muchas personas. Paso por una injusticia, ya lo he dicho”, declaró a la prensa en el aeropuerto internacional Jorge Chávez, ante aficionados que voceaban su nombre.
El capitán del combinado inca comentó que tras la sanción del TAS “se especulaba mucho sobre mi posición ante el equipo. Y yo estoy a muerte con mi selección. En las buenas y en las malas”.
El artillero peruano quedó fuera del Mundial (14 de junio al 15 de julio) luego del Perú-Argentina, el 5 de octubre por las eliminatorias sudamericanas, al dar positivo por el metabolito de la cocaína benzoilecgonina, una sustancia incluida en la lista de productos prohibidos de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).AFP