(Captura: Clarín)
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Redacción EC

Sam Ballard era un prometedor rugbista de que quedó tetrapléjico después de tragar una babosa por una apuesta que hizo con sus amigos.

En ese entonces, hace cerca de 10 años, según el medio inglés The Sun, Sam tenía sólo 19 y era un gran deportista, pero en una noche de fiesta se comió el animal, lo que le costó muy caro.

Después de tragar la babosa, él enfermó rápidamente y fue llevado al médico, donde se descubrió que estaba infectado con "lungworm" de rata.

Este parásito se trata de un gusano que se encuentra en los roedores, pero los caracoles o babosas pueden infectarse cuando comen las heces de las ratas. El australiano, ahora de 28 años, contrajo "meningoencefalitis eosinofílica" y estuvo en coma por 420 días.

(Captura: Clarín)
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Cuando despertó, se supo que estaba tetrapléjico. "Está devastado, cambió su vida para siempre, cambió mi vida para siempre. El impacto es enorme", cuenta la mamá del ex deportista.

Ahora, casi una década después, Sam necesita atención las 24 horas del día, ya que está postrado en cama, no puede controlar la temperatura de su cuerpo y debe ser alimentado por tubo.

Fuente: GDA/Emol

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