Gisella López Lenci

“Vengo de uno de los países más ricos del planeta. Sin embargo, la gente de mi país está entre los más pobres del mundo. La abundancia de nuestros recursos naturales alimenta la guerra, que es la causa de la violencia extrema y la miseria en la República Democrática del Congo”. El médico congoleño Denis Mukwege se presentaba así ante el mundo al recibir en el 2018 el Premio Nobel de la Paz, resumiendo en pocas líneas la tragedia que viven desde hace décadas. Una tragedia que, en realidad, se remonta a fines del siglo XIX, pero que se ha renovado en las últimas semanas.