Roger Zuzunaga Ruiz

Más de 50 años de una cruel dictadura, 13 años de guerra civil donde el régimen usó armas químicas, arrasó barrios enteros y torturó a sus enemigos. Hoy, apenas 3 meses después de la caída del dictador Bashar al Assad, una nueva matanza con ejecuciones a sangre fría sacude a Siria. Desde el jueves, casi 1.500 personas han muerto en el oeste del país. De ellas, 973 eran civiles de la minoría alauita, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH). ¿Por qué se ha recrudecido la violencia en la nación que está apostando por una transición que implica el desarme de los numerosos grupos rebeldes con presencia en gran parte del territorio?