El caso de la niña asesinada que se resolvió 31 años después en Francia

Hace tres décadas, un terrible caso de homicidio remeció a Francia. El cuerpo desfigurado de una menor de 4 años fue hallado envuelto en una manta y abandonado en una autopista cerca de la localidad de Suèvres, sin jamás ser reconocido ni reclamado por nadie.

Por años el caso de la "pequeña mártir de la A10" permaneció inconcluso, sin una sola pista acerca de su identidad ni de los responsables de su asesinato. Pero esta semana, una fortuita prueba de ADN reveló y llevó ante la Justicia francesa a los posibles responsables del terrible homicidio: los propios padres de la menor.

Las pistas del caso

El día 11 de agosto de 1987 fue encontrado sin vida el cuerpo de una pequeña, abandonado cerca de la localidad francesa de Suèvres. Su cadáver presentaba señales de quemaduras de plancha, fracturas mal curadas y cicatrices de mordeduras humanas realizadas por una mujer, según los expertos. Era evidente que la niña había sido víctima de maltratos por mucho tiempo.

Ni la difusión de su fotografía en Francia y en otros 30 países, ni las consultas en más de 65.000 escuelas y guarderías, sirvieron para dar con la familia de la pequeña.

Sin pista alguna, el caso fue cerrado en 1997, pero desde entonces se realizaron pruebas del ADN encontrado en la manta donde iba envuelta en dos ocasiones: una en 2008, la cual no dio resultados, y la más reciente en 2017, la cual por fin coincidió con un joven que había sido detenido en 2016 por violencia.

El sujeto resultó ser el hermano de la pequeña y permitió seguir la pista hasta sus padres, localizados en los departamentos de Aisne y Seine-Saint-Denis, al norte de Francia. Tras verificar los registros administrativos, la Policía comprobó que una de los siete hijos de la pareja, una pequeña llamada Ynass, que aparecía en las solicitudes de ayudas sociales, no había sido censada en décadas.

Según el diario Le Parisien, la madre de la niña decía a sus conocidos que Ynass estaba en Marruecos bajo el cuidado de su abuela. Los padres, de origen marroquí, fueron detenidos el martes por asesinato y violencia contra menores de 15 años, y deben ser llevados ante el Tribunal de Gran Instancia de Blois. 

"Hay que señalar los esfuerzos de los gendarmes, que nunca han abandonado. Como alcalde, los recibí a menudo y siempre sentí su voluntad de llegar hasta el fondo del asunto", declaró el ex alcalde de la localidad, Raphaël Pilleboue en el diario "La République du Centre".

Según constata El País, el fiscal del caso se refirió a las declaraciones del padre de 66 años. 

"Dijo que vivió un infierno con su esposa, que ella era violenta con él y con las tres hijas que tenían, que él vivía dominado por su mujer y que un día, cuando entró a casa, se encontró con el cuerpo sin vida de la niña. Metió a toda la familia en el coche rumbo a Marruecos y, temprano en la mañana del 11 de agosto de 1987, dejó abandonada en la autopista a su hija muerta".

Por su parte, la madre de 64 años sostuvo otra versión y si bien primero dijo que su hija seguía viva, tal como contó durante casi 31 años a sus conocidos, finalmente terminó reconociendo que su hija había fallecido. Pero a pesar de admitir que "podría haber sido violenta con Ynass", rechazó ser la responsable de su muerte.

Fuente: Emol,GDA