(Foto: AFP)
Agencia AFP

Sin quererlo, Didier Silva se convirtió en el joven más de . Con 22 años y unos 400 kilos, debió ser sacado en helicóptero de una zona selvática del Pacífico para que los médicos pudieran salvarle la vida.

Silva, un joven negro con varios problemas de salud, vive en la extrema pobreza con su abuela de 85 años en un caserío del municipio de Mosquera, en el departamento de Nariño.

El sábado un helicóptero de la Fuerza Aérea, escoltado por un avión artillado de espionaje, lo trasladó desde allí hasta un hospital de Cali, a 400 km de Mosquera, donde inició un complejo tratamiento para perder 90 kilos antes de ser sometido a una cirugía bariátrica.

"Es un paciente con trastorno mental severo, tiene atrofia en sus pies y en sus manos; también tiene enfermedades asociadas a su obesidad como síndrome metabólico, diabetes, apnea del sueño, hipertensión. Es un comedor compulsivo", dijo a la AFP Salvador Palacio, director de la Fundación Gorditos de Corazón.

A Silva le fue diagnosticado de pequeño un trastorno mental que heredó de su madre, y que derivó en el desorden alimentario. Desde los 10 años no puede caminar, y los vecinos y los médicos debieron trasladarlo en una carretilla hasta el helicóptero.

"Esto apenas está comenzando porque ya está en Cali, en el hospital Universitario del Valle, pero sigue la tarea más importante, que es el tratamiento integral y el seguimiento", asegura Palacio, cuya organización ayuda a las personas con problemas graves de sobrepeso.

Gracias a la intervención de los médicos, el riesgo de muerte es mínimo, según Palacio.

El traslado de Silva fue difícil desde el comienzo. Su vivienda está ubicada en un municipio al que solo se accede en lancha o helicóptero, y donde también operan grupos armados ilegales.

Durante todo el trayecto, se le vio sonriente aun cuando estaba sedado y con oxígeno.

Un grupo de bomberos lo recibió en Cali y lo montó en una ambulancia acondicionada para su tamaño, según observó un periodista de la AFP.

El porcentaje de personas con sobrepeso en Colombia alcanzó un máximo histórico y afecta a más de la mitad de la población adulta, según un informe gubernamental publicado recientemente.

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