
Decir que el Partido Demócrata ha perdido fuerza en EE.UU. desde la victoria de Donald Trump es quedarse corto. Los expertos, medios de comunicación y votantes afirman que la formación ha ido a la deriva en los últimos meses, sin liderazgos claros y con divisiones internas que se han traducido en una postura débil ante la agenda del presidente republicano. Un letargo del que parece querer despertar.
Los demócratas no solo perdieron la Casa Blanca y ambas cámaras del Congreso ante Trump en noviembre del año pasado. La contundencia de la victoria del líder republicano los sumió en un estado de conmoción y en una inmediata crisis interna. La frustración de sus votantes se ha reflejado en las últimas encuestas, en las que el Partido Demócrata ha obtenido índices de aprobación históricamente bajos.
Pero esta semana los demócratas han dado un paso en su búsqueda de tener un rol más activo como oposición. El Comité Nacional Demócrata (CND) anunció el lanzamiento de una nueva “sala de guerra” para ampliar y optimizar las operaciones de comunicación, investigación y movilización de su formación.
El objetivo principal es poner en marcha una “agresiva operación de respuesta rápida” para contrarrestar en tiempo real la desinformación de la Administración Trump, según explicaron en su sitio web. También buscan llevar el mensaje demócrata a nuevos espacios de información a través de una amplia red de microinfluenciadores, así como poner a los republicanos a la defensiva para exponer los impactos negativos de la agenda del gobierno y hacerles rendir cuentas.
“Somos el partido de la oposición. Nuestro trabajo es poner a los republicanos en sus talones, ponerlos a la defensiva (...) Tenemos un papel, y es litigar contra Donald Trump, Elon Musk y JD Vance”, dijo el presidente del CND, Ken Martin, en una entrevista con el diario “The Washington Post”.
NEW: We’re launching a new DNC War Room, aggressively scaling up our rapid response operation to hold Trump and Republicans accountable. https://t.co/WQwT55GzKY
— Democrats (@TheDemocrats) April 7, 2025
Martin reconoció que un factor importante en la derrota de los demócratas en el 2024 fue el dominio de los republicanos para impulsar su mensaje en el ecosistema de la información en general, desde medios conservadores hasta podcasts y, por supuesto, las redes sociales. La ventaja de Trump en ese campo se ha sentido también en los primeros meses de su gobierno.
“Mientras Donald Trump sigue impulsando una agenda que aumenta los costos, destruye empleos y arruina vidas, también sigue mintiendo, manipulando y engañando para evadir la rendición de cuentas, y el Comité Nacional Demócrata (CND) está redoblando sus esfuerzos para brindar al pueblo estadounidense datos reales e información precisa sobre el impacto de sus políticas”, dijo Martin en un comunicado.
Medidas estratégicas
La creación de esta “sala de guerra” llega en un momento delicado para Trump, quien se encuentra en el centro de la atención mundial debido a sus políticas arancelarias. Dentro de Estados Unidos, el descontento hacia su agenda quedó plasmado el último fin de semana con manifestaciones en su contra en todo el país.
En este contexto, el analista internacional Francesco Tucci considera que un plan de acción para contrarrestar la desinformación es oportuno. “Es una iniciativa de la oposición para contrarrestar el discurso de Trump. Un discurso que en ocasiones está plagado de imprecisiones, manipulaciones y miradas parciales, como en el caso de la declaración del Día de la Independencia Económica, cuando explicó cómo se han calculado los aranceles. La idea de los demócratas puede ser interesante porque quieren desarmar y explicar el discurso oficialista”, dice a El Comercio.
Para la politóloga María Puerta Riera, profesora de Gobierno Americano en el Valencia College de Orlando, las últimas acciones demócratas buscan exponer las debilidades del gobierno de Trump por sus excesos en estos primeros meses de gestión.
“Creo que se trata de la ampliación de una estrategia política de atacar todos los frentes, no solamente como respuesta del partido, sino como un vehículo para presionar a la administración de Trump, y que no sienta que no tiene contestación”, señala a este Diario.
Tucci explica que el Partido Demócrata ahora está avanzando con una serie de iniciativas para paliar el gran dominio institucional y parcialmente mediático que tiene en este momento el mandatario.
“Los demócratas se encuentran en desventaja porque no encontraron la manera de contrarrestar el discurso trumpista. Después de las elecciones el Partido Demócrata quedó mal parado. No sabe cómo ejercer un papel de oposición que sea prácticamente creíble. Por eso está avanzando con esta iniciativa, que habrá que ver si funciona porque claramente la respuesta de la administración Trump será ‘fuego contra fuego’”, añade.
Retos urgentes
Además de mejorar su estrategia comunicativa, Tucci destaca la urgencia de establecer un liderazgo claro, objetivo que no han podido cumplir desde la derrota electoral de fines del 2024.
“Si no hay un liderazgo fuerte en el Partido Demócrata, la ‘sala de guerra’ puede ser una iniciativa aislada. Dependerá mucho también de las consecuencias materiales que se darán en el corto y mediano plazo con el tema de los aranceles. Porque al fin y al cabo, al norteamericano promedio interesa la economía. Y si empieza a dispararse la inflación, el discurso trumpista puede encontrar resistencia”, apunta el experto.
Puerta enfatiza que el Partido Demócrata tiene varios retos urgentes. Entre ellos sacar a su base de la depresión poselectoral, definir su estrategia, simplificar sus objetivos, y prepararse para las consecuencias de las decisiones políticas que está tomando el gobierno, informando al país sobre el futuro que le espera a todos los ciudadanos que viven en este país.
“Los objetivos claves son: convencer a la población de que el presidente está hablando en serio y que sus planes traerán consecuencias muy serias para todos. En pocas palabras, los demócratas no lograron convencer a los electores en el 2024 de que las amenazas eran ciertas. Ahora sienten que tienen los argumentos necesarios para hacerlo”, finaliza Puerta.