(Captura:Twitter)
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Redacción EC

Un vehículo en el que viajaban ocultos cinco migrantes cruzó por la fuerza el sábado la frontera entre Marruecos y el enclave español de Melilla, en el segundo incidente de este tipo en dos días, informaron las autoridades.

Este método para hacer entrar a migrantes en territorio español no se usaba desde hacía años, pero fue utilizado una vez en marzo y de nuevo el viernes y el sábado.

Melilla y Ceuta -400 km al oeste-, el otro enclave español en la costa mediterránea al norte de Marruecos, tienen las dos únicas fronteras terrestres entre África y la Unión Europea.

Según la delegación del gobierno español en Melilla, el coche se aproximó al puesto fronterizo con normalidad, haciendo cola con otros vehículos.

"Una vez en el recinto, al aproximarse al primer control policial, dio un cambio brusco de dirección, tomó un carril aledaño al que venía ocupando y, a toda velocidad, burló peligrosamente los controles", explicó.

El vehículo provocó "daños a su paso en una de las barreras del mismo recinto fronterizo" y obligó "a los agentes a abandonar sus puestos para no ser arrollados", precisó.

Ya en Melilla, el conductor, un joven marroquí, abandonó el coche y salió corriendo pero fue rápidamente alcanzado por la policía.

En el interior del vehículo se encontró a cinco migrantes -dos de ellos en el maletero, otros dos en un doble fondo bajo los asientos traseros y uno en un habitáculo creado en el salpicadero.

Tres eran menores, precisó el comunicado.

El viernes otro coche había forzado el paso por el puesto fronterizo de Melilla llevando a nueve migrantes.

Las imágenes de una cámara de vigilancia tuiteadas por el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, mostraron a un oficial de policía cerrando precipitadamente las verjas en la frontera y proyectado con fuerza contra el suelo cuando el coche entró a gran velocidad.

Los migrantes intentan con regularidad entrar en Ceuta y Melilla, ya sea saltando en grandes grupo las altas vallas que las rodean o escondiéndose en dobles fondos de vehículos.

España anunció en marzo que casi duplicaría la capacidad de sus centros de acogida para migrantes en estos dos territorios, llevándolos de 4.500 a 8.500.

Migrantes y refugiados recurren también con regularidad a precarias embarcaciones para cruzar las aguas del Mediterráneo que separan el norte de África del sur de España.

Fuente: AFP

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