Sergio Mattarella, presidente de Italia. (Foto: Reuters/Alessandro Bianchi)
Sergio Mattarella, presidente de Italia. (Foto: Reuters/Alessandro Bianchi)
Agencia AFP

El doceavo jefe de Estado de , , elegido en 2015, jurista íntegro y veterano político, pasará a la historia como el presidente que encaró a las formaciones antisistema y populistas del país.

"Nadie me podrá acusar de haber obstaculizado la formación de un gobierno para el cambio. Les he facilitado todo para que lo lograran", aseguró este domingo Mattarella al término de una de las jornadas más difíciles de su larga carrera política.

Su rechazo a designar como ministro de Economía a Paolo Savona, un anciano economista contrario al euro, generó una crisis sin precedentes y el fracaso de la formación del primer gobierno formado por dos partidos antisistema: los díscolos del Movimiento 5 Estrellas y la ultraderechista Liga de Matteo Salvini, los más votados en las elecciones del 4 de marzo.

Matttarella, de 76 años, que vivió personalmente los horrores de la mafia tras el asesinato de su hermano, es un católico reservado, que inició su carrera política hace 30 años en las filas de la otrora poderosa Democracia Cristiana.

"No me pueden imponer los ministros", dijo el domingo tras explicar que tenía el deber de defender las prerrogativas de su cargo.

Elegido en 1983 por primera vez al parlamento atravesó los años más negros de la historia reciente de Italia sin mancha ni escándalos.

Nacido en Palermo (Sicilia) en 1941, se ha caracterizado por ser un hombre correcto, de sólidos principios, que cuando fue ministro de Educación en 1989 con el gobierno del "inoxidable" Giulio Andreotti renunció al cargo para protestar contra la adopción de la llamada ley Mammí, que concedía tres canales de televisión al magnate de las comunicaciones Silvio Berlusconi.

La vida de Sergio Mattarella, juez del Tribunal Constitucional y docente universitario, quedó marcada por el asesinato en 1980 de su hermano Piersanti, entonces presidente de la región de Sicilia, por orden de la mafia siciliana, la Cosa Nostra.

Acribillado frente a su residencia, Piersanti murió en brazos de su hermano mientras lo conducía al hospital. Las fotos con el traje manchado de sangre mientras hablaba con la policía y los investigadores dejan entrever su fortaleza y entereza pese al dolor.

"Un catocomunista" en la presidencia

Discreto, viudo, padre de tres hijos y seis veces abuelo, el presidente de la República es un hombre austero, que va los domingos a misa.

Tras la desaparición de la Democracia Cristiana en la década de los 1990, Mattarella participó en el nacimiento del Partido Popular y en el de la coalición La Margarita.

Luego estuvo en el grupo fundador del Partido Democrático de centro-izquierda, formado en buena parte por ex comunistas y democrata-cristianos progresistas.

Para sus detractores, el antiguo ministro de Andreotti es "el enésimo catocomunista", una peculiar combinación muy italiana de catolicismo con comunismo, como lo tildó Matteo Salvini, el líder de la Liga.

El hombre que debe garantizar el equilibrio de la vida política -es el único con derecho a disolver el parlamento y a convocar legislativas anticipadas- es un experto constitucionalista.

Paradójicamente el Movimiento 5 Estrellas amenaza con pedir su "destitución", el llamado "impeachment", por violar el artículo 90 de la Constitución, es decir por traicionar el país.

AFP/Kelly Velásquez

Contenido sugerido

Contenido GEC