Brasilia (Reuters)
La candidata socialista Marina Silva ha recortado la distancia que la separa de la presidenta Dilma Rousseff para la carrera presidencial en Brasil, según una encuesta publicada hoy, lo que abriría el camino a una segunda vuelta y donde la ambientalista aparece en buena posición para ganar.
Silva, quien entró a la carrera por la presidencia la semana pasada tras la muerte del candidato que encabezaba su lista, tiene el 29% de apoyo para los comicios del 5 octubre, según el sondeo del instituto de estudios de opinión Ibope.
La encuesta mostró una baja en la intención de voto para Rousseff a un 34% desde un 38%; mientras que el otro candidato opositor, Aecio Neves, cayó a un 19% desde un 23%.
En una probable segunda vuelta entre los dos candidatos más votados, que se realizaría el 26 de octubre, Silva derrotaría a Rousseff por un margen de nueve puntos, según la encuesta.
Silva, una conocida ambientalista que consiguió el tercer lugar en las elecciones del 2010, ha sacudido la competencia desde que su candidatura fue confirmada el miércoles pasado.
No obstante, muchos analistas políticos han advertido que tanto Rousseff como Neves tienen tiempo y recursos suficientes para contrarrestar el avance de Silva antes de las elecciones del 5 de octubre.
Analistas han dicho que Silva se ha beneficiado de la simpatía tras la trágica muerte de Eduardo Campos, quien la había invitado a unirse como su compañera de lista.
Silva es vista como una figura que se opone al orden establecido y que puede restaurar principios éticos en la política brasileña.
La perspectiva de que Silva derrote a Rousseff ha alentado una corriente alcista en el mercado accionario de Brasil durante las últimas dos semanas, porque los inversionistas apuestan al fin de las políticas intervencionistas de la presidenta, que han minado la confianza de los empresarios en una economía emergente que hace poco vivía un auge.