Lula es señalado como líder de red de tráfico de influencias

El ex presidente Lula da Silva ha sido señalado como la cabeza de una red de tráfico de influencias que tuvo como propósito beneficiar los intereses económicos de Odebrecht, la multinacional protagonista de Lava Jato, el caso de corrupción más grande que ha golpeado Brasil y a nueve países de América Latina.

La denuncia vino de parte de Alexandrino Alencar, un ex directivo de Odebrecht que en su momento fue el más cercano a Lula da Silva. Alencar entregó a las autoridades un gráfico que demuestra la influencia que habría ejercido el ex presidente en distintas etapas en el esquema de corrupción que investiga la fiscalía.

Lava Jato trata sobre la existencia de un club formado por políticos y los empresarios más poderosos de Brasil, los cuales se dividían las obras públicas a cambio de millonarios sobornos. El caso inició con la corrupción en Petrobras, pero después se supo que este mismo mecanismo se expandió en el continente. 

De acuerdo al cuadro de Alenca, Lula está vinculado en al menos siete momentos claves de esta investigación. Por ejemplo, el gráfico destaca la anotación "Cuenta $ Italia", la cual consistiría en los fondos que Odebrecht habría destinado al Partido de los Trabajadores, organización política liderada por Lula da Silva.  

 (Gráfico que entregó Alexandrino Alencar a las autoridades de Brasil) 

Otro punto señalado es la compra del inmueble donde funciona el Instituto Lula, institución fundada por el ex mandatario que ejerce como su portavoz. Lula ha negado varias veces que su fundación haya recibido dinero de las constructoras implicadas en Lava Jato. Sin embargo, las autoridades creen lo contrario.

"Sin el poder de decisión de Lula, este esquema sería imposible", dijo en septiembre del año  pasado el fiscal brasileño Deltan Dallagnol. "Lula fue el director de esta gran orquesta que se dedicó a saquear las arcas públicas". 

La fiscalía maneja la hipótesis de que Lula, aprovechando su peso político, era una suerte de "abre puertas" para los negocios de constructoras como Odebrecht en su país como en otros. A cambio de ello, recibía cuantiosos pagos. Según contó Marcelo Odebrecht, ex CEO de la constructora, su empresa abrió una cuenta por más de USD10 millones para los gastos personales del ex mandatario.

La denuncia de Alencar se conoció luego de que el juez supremo Edson Fachin hiciera pública su decisión de autorizar a la fiscalía para que investigue a 98 políticos que se habrían beneficiado, de alguna manera, con los sobornos de Odebrecht. 

Según reportó el diario Folha, entre las funciones que tenía Alencar era la de "cultivar y fortalecer" las relaciones de Lula con Odebrecht. Este ex directivo estuvo en Lima en el 2013, acompañando al ex presidente. Aquella vez, Alencar se reunió con el ex presidente Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia. 

Alencar fue condenado a 15 años y siete meses de prisión por delitos de corrupción y lavado de dinero en el 2016. La sentencia fue firmada por el juez Sergio Moro. Él es uno de los ex directivos de Odebrecht que aceptó colaborar con las autoridades a cambio de reducir su estadía en la cárcel. Al igual que su ex jefe Marcelo.