La noche del viernes, el ejército israelí atacó el cuartel general de Hezbolá, ubicado en el sótano de un edificio residencial en pleno corazón de Beirut. “Ahí eliminamos a Hassan Nasrallah y a otros jefes de su organización, además de los que habíamos ido eliminando durante las semanas previas”, comenta Roni Kaplan, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) a El Comercio y a un grupo de medios internacionales presentes en Tel Aviv por invitación de la organización Fuente Latina.