Callao Monumental, por Martín Soto Florián
Callao Monumental, por Martín Soto Florián
Martín Soto Florián

Callao Monumental constituye una propuesta cultural para poner en valor el Centro Histórico del puerto. Lamentablemente, hoy aparecen sombras enormes en torno a dicha propuesta. Hace cinco años, el empresario –uno de sus principales impulsores– compró la emblemática Casa Ronald, que ha sido el epicentro de la iniciativa ‘monumental’. El domingo, Shavit fue detenido en el aeropuerto Jorge Chávez, al mismo tiempo que tres casas (en el Callao, Magdalena y Camacho) del ex alcalde de Carmen de la Legua y actual gobernador del Callao, Félix Moreno, eran intervenidas por la fiscalía. 

Felix Moreno, autoridad chalaca desde 1996, ya enfrenta casos como el referido a la construcción de un spa en las instalaciones del Cuartel General del Ejército en San Borja, o la denuncia por haberse apropiado del dinero de la venta de predios por un estimado de US$5 millones. A estos casos se suman ahora los cargos que enfrentará por tráfico de influencias y lavado de activos; en donde Shavit habría recibido parte del presunto pago de US$4 millones –realizado por Odebrecht a Moreno– a través de una firma ‘offshore’; una suerte de Maiman para Félix.

A la obra Vía Costa Verde, cuyo contratista es Odebrecht y que gracias a las adendas firmadas por Moreno pasó de S/302 millones a más de S/470 millones, se sumaría la de la avenida Gambetta, cuyos contratistas –Andrade Gutierrez y Queiroz Galvao– ejecutaron la sección 4 de la Interoceánica y estarían vinculadas también al Caso Lava Jato. Gambetta, como reporta la contraloría, ha costado ya más de S/500 millones, con un incremento superior al 40% del monto inicial (de S/355 millones). A la fecha no está liquidada y se desconoce cuál será su costo final.

Monumentales pero no sorprendentes son los descubrimientos de ayer. El ex asesor legal del ex gobernador Álex Kouri presidió el tribunal arbitral que falló en favor precisamente de Andrade Gutierrez y Queiroz Galvao por un monto de S/27 millones. 

Monumental también ha sido el uso y abuso de adicionales de obras fraudulentas y arbitrajes sospechosos, los que parecen haber ido de la mano con el incremento del patrimonio de las autoridades de turno. Un turno bastante largo: más de 20 años de gobierno de Chim Pum Callao, con casi todas sus autoridades investigadas o denunciadas ya sea por corrupción, peculado, negociación incompatible, interceptación telefónica o enriquecimiento ilícito, entre otros.

Hace menos de un año escribí en este Diario que el Callao “es la madre del cordero”, que el problema se origina en la droga, la corrupción y “la extraña relación entre política y crimen organizado”. Lo que ocurre en el Callao no es un hecho novedoso ni aislado. Por el contrario, revela una sospechosa forma de praxis política y gestión pública. 

No se trata solo de corrupción, involucra también bandas, cupos, extorsiones y pandillas, y se traduce en crimen, violencia y sangre. Poco antes de ser acribillado, Wilbur Castillo denunciaba que las autoridades de Chim Pum Callao conformaban una organización criminal de ‘chuponeo’ y, cual crónica anunciada de su propia muerte, señalaba responsables. El mismo día, su hermano señaló públicamente como autor intelectual del crimen a Félix Moreno, junto a Patricia Chirinos y Rogelio Canches: “Los denuncio públicamente. Usted, Félix Moreno, sabe lo que ha pasado acá, usted lo sabe y no se haga el desentendido”. La respuesta de Moreno fue minimizar lo ocurrido diciendo que se trataba de “delincuentes que se matan entre ellos”.

Monumental será la explicación para comprender cómo el ex alcalde y gobernador puede tener tantas casas, tantos bienes y tanta buena fortuna. Monumental también será la relación entre el crimen organizado, las bandas, el narcotráfico y la política que se va a descubrir en el Callao.