
Seis vidas segadas por una negligencia. Una negligencia monumental y bárbara. Lo que pasó en el Real Plaza de Trujillo tiene responsables y tendrán que hacerse cargo.
Esta semana los peritos terminarán el informe sobre las causas del colapso. La caída del techo del patio de comidas del Real Plaza dejó también más de 80 heridos.
Entre los heridos está un joven al que tuvieron que amputarle la pierna para rescatarlo. Su enamorada murió aplastada.
La empresa tiene la principal responsabilidad. No hubo un terremoto ni vientos huracanados ni lluvias torrenciales. Esa empresa, sus directivos y sus propietarios tienen que hacerse cargo.
Real Plaza de Trujillo pertenece al holding InRetail. Su director ejecutivo ha dicho que “sería irresponsable decir quiénes son los responsables en este momento y les pedimos respetar el proceso legal que se tiene” (“Gestión”, 27/2/25).
Lo irresponsable es, por supuesto, quitar cuerpo ante una tan flagrante negligencia. En lugar de dar una conferencia sobre la tragedia de Trujillo, el CEO de InRetail habló en una conferencia para presentar los estados financieros de la empresa.
El manejo de las comunicaciones de esta empresa, que pertenece al grupo Interbank, ha sido desastroso. Se han escondido lo más que han podido y no asumen su responsabilidad ante la opinión pública.
La propiedad es un derecho. Por eso exige responsabilidad. En este caso, responsabilidad legal y, lo más probablemente, penal.
Los familiares de las víctimas mortales y los heridos pueden buscar y buscarán justicia. Real Plaza no puede fugarse ni desconocer sus títulos o a sus representantes legales.
Alguien mandó a construir. Alguien contrató el diseño, a la constructora, a los proveedores. Alguien compró los materiales, y todo eso está registrado.
El capital no está basado en la irresponsabilidad, sino en la responsabilidad legal. Corresponde a los operadores de justicia determinar las sanciones e indemnizaciones exactas.
Queda claro que el primer responsable es la empresa Real Plaza de Trujillo y el holding al que pertenece. Hace muy mal este grupo empresarial en evadirse de la opinión pública. No podrá evadir, por cierto, a la justicia.
Una combi pirata se fuga del lugar del accidente que ha causado. ¿Es Real Plaza una combi pirata? ¿Lo es InRetail? ¿Lo es Interbank?
Ningún fenómeno natural causó el desastre. Ha sido el diseño, la construcción o los materiales. Y en eso la empresa tiene absoluta responsabilidad. Esperemos y exijamos que la asuman y que no evadan más.