¿Será cierto que el Perú está mejorando?, por Rolando Arellano

En estos días, los datos oficiales en el Perú muestran una cantidad nunca vista de buenas cifras económicas: crecimiento del PBI, de la inversión pública y privada, del consumo, de la recaudación y de la salud fiscal. “¿Serán verdad?”, se preguntó a miembros distinguidos de la Sociedad Peruana de Marketing (SPM), que reúne a profesionales interesados en aportar sus conocimientos para el beneficio de individuos, empresas y sociedad. Estas fueron las respuestas.

Uno de los socios, Percy, señaló que puede dar fe del consumo privado creciente que muestran las cifras del Banco Central, pues crecen las ventas de ‘retail’, entretenimiento y restauración que él conoce. Algo que Adi corrobora al decir que ve lo mismo en la recuperación, alentadora, de las ventas de las empresas minoristas en las que él trabaja. Una buena parte tiene que ver con el Mundial de Fútbol, dicen, pero sienten que el cambio va más allá de eso.

Solón, con su experiencia, ve un crecimiento de la inversión pública, como era de esperarse luego de tantas demoras, pero también lo observa en la inversión privada. De hecho, Álvaro dice que en las empresas que él dirige o conoce hasta se ha vuelto a abrir, tímidamente, la demanda por profesionales de alto nivel. Algo se mueve, añade. Eso lo corroboran Moyra y Rolando, cuyos clientes están regresando con proyectos que tenían encarpetados, y a los que por fin les ven oportunidad de desarrollo y adecuación a los mercados peruanos.

Alberto, que conoce bien el sector construcción, indica que sus ventas han empezado a crecer, como si se hubiera liberado un dique de compradores, y ve además nuevas construcciones apareciendo por varios lugares. Julio, con más cercanía al sector bancario y financiero asiente, pues hay un crecimiento importante de la demanda de créditos privados, corroborando que el financiamiento impulsa el consumo que los otros señalan.

Pero más allá de la economía, Jorge, gran seguidor de la temperatura social añade que nunca había visto tanto orgullo y unidad en el sentimiento peruano. Hoy nadie, enfatiza, nadie, se ha puesto en contra de este orgullo nacional. Y el otro Alberto, publicista, enviaba mensajes desde Rusia diciendo que nunca había estado tan bien la imagen del Perú y la de los peruanos ante el mundo, con nuestras barras entusiastas pero, en general, respetuosas. Ciertamente hay aún muchos problemas, pero hasta el tema político, dijeron todos, está más calmado que hace unos meses.

En fin, la opinión de esos socios de la SPM fue que los datos oficiales parecían tener sustento real. Y pensaban que debían difundirse, para que esas buenas noticias muestren que sí es posible avanzar hacia el bienestar de todos y nos motiven a seguir impulsándolo.