(Foto: Archivo El Comercio)
(Foto: Archivo El Comercio)

El transporte pblico es percibido como el segundo problema ms grave de Lima. Se estima que la ciudad pierde 7.000 millones de dlares al ao por la crisis del transporte. Por ello, y pese a la cuestionada gestin de la ex alcaldesa de Lima, Susana Villarn, la mayora de limeos aprobaba la reforma del transporte y su continuacin por parte del actual alcalde Luis Castaeda.

Esta reforma se basa en un sistema de corredores viales, a ser otorgados por concursos a operadores privados, reduciendo as la cantidad de unidades vehiculares y retirando a los operadores informales, incluidos, por supuesto, el sambenito de nuestro transporte: las combis piratas. En enero del 2014 empez el otorgamiento de la buena pro a las primeras empresas ganadoras de dichos concursos y desde agosto del 2014 comenz su operacin.

La semana pasada, sin embargo, la reforma encontr un gran bache. La Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) declar nulos los contratos de tres consorcios que operaban en los corredores Tacna-Garcilaso-Arequipa, Javier Prado, y San Juan de Lurigancho-Brasil. Esto trajo la queja de los pasajeros, que vieron reducida la oferta de buses, y de dos operadores excluidos, que ya han anunciado una demanda arbitral contra la MML pidiendo una indemnizacin de 120 millones de dlares.

La municipalidad argumenta que estos contratos son nulos porque no contaron con la aprobacin previa del Ministerio de Economa y Finanzas (MEF), entidad que luego de revisarlos haba encontrado graves deficiencias. Por esa razn, haba solicitado a los concesionarios que acepten las adendas preparadas por la MML y, ante su negativa, declar la nulidad de los contratos y dispuso el retiro de sus buses de las rutas originalmente entregadas.

Una decisin bastante polmica por parte de la MML, ms aun si se recuerda que la actual administracin haba adjudicado ya algunas rutas usando los mismos contratos. Adems, en octubre del ao pasado, la municipalidad se haba opuesto frontalmente al MEF y a su postura de que dichos contratos deban pasar por su filtro.

Para la MML, entonces, los contratos no tenan que contar con el visto bueno del MEF, ya que no comprometan recursos pblicos es decir, eran autosostenibles y la obligacin de pasar por dicha aprobacin no era aplicable, pues esta recin surgi con una modificacin legal posterior a la celebracin de dichos convenios. En otras palabras, se trataba de la aplicacin retroactiva de una norma, algo prohibido por la Constitucin.

Qu sucedi para el diametral giro de la MML? Es una pregunta sin respuesta hasta la fecha. Lo cierto es que la municipalidad respalda ahora al MEF y ha cuestionado los contratos firmados, responsabilizando a la gestin de Villarn por haberles dejado esas bombas de tiempo.

La inusitada epifana de la municipalidad, sumada a la crtica de algunos expertos a su posicin, siembran legtimas dudas respecto de los verdaderos mviles de este cambio. Se trata realmente de un vicio, o es solo un intento de la actual administracin por desechar lo realizado por la anterior?

Y si fuera esto ltimo, nos encontraramos ante la terrible constatacin de que nuestras autoridades an no comprenden que los contratos no empiezan ni terminan cuando ellos asumen y culminan sus encargos. Y que ignorar los compromisos asumidos por las administraciones anteriores puede suponer costosas consecuencias.

En estas circunstancias, es fundada la preocupacin de quienes temen que este sea el inicio del hundimiento de la reforma del transporte. El desconocimiento de contratos, no solo puede acarrear millonarias indemnizaciones, sino tambin dar la seal que necesitan las combis piratas para volver a la carga.