(Ilustración: Giovanni Tazza)
(Ilustración: Giovanni Tazza)
Hace 100 años

Los ‘barbudos’, como se les conoce a los soldados franceses, vienen usando recientemente cascos metálicos que han salvado la vida a un gran número de ellos. Actualmente se trabaja sin descanso en una nueva y formidable industria encargada de fabricar los cascos de acero que pesan algo menos de un kilo. Según se informa, las materias primas que requiere esta salvadora prenda de cabeza son la plancha de acero para el casco, aluminio para contribuir a darle forma, piel de carnero para la parte interior y paño para el forro.

H.L.M.