(Ilustración: Giovanni Tazza)
(Ilustración: Giovanni Tazza)
Hace 100 años

El Gobierno expide un decreto estableciendo obligatoriamente la jornada de ocho horas de trabajo y el arbitraje. Son puestos en libertad todos los obreros que habían sido detenidos. Se restablece poco a poco el servicio de tranvías a los balnearios y los tranvías urbanos. Hubo una gran manifestación en la Plaza de Armas y el presidente José Pardo dijo a la multitud: “Me complace que mi firma aparezca en una resolución que establece para vosotros, los obreros, principios de justicia y de derecho alcanzados ya por otros pueblos cultos”.

H.L.M.