La Universidad de San Marcos exhorta a sus alumnos a deponer todo sentimiento de desconfianza y a persuadirse de que sus autoridades, por respeto a sí mismas, por conciencia de sus deberes hacia la juventud y la sociedad, y por prestigio y honra de la ilustre corporación confiada a su cuidado, procuran atraer a su servicio al personal docente más capaz y preparado que puede obtenerse y trabajan con abnegación y firmeza para realizar en breve plazo el ideal común de la reforma progresiva de la universidad, satisfaciendo así los justos anhelos de la juventud. H.L.M.