Este diminutivo, obvio derivado de caña, se documenta en la lengua familiar del Perú y Chile como equivalente del general pajilla, es decir, ‘tubo delgado de plástico que sirve para sorber líquidos’. Equivalente americano, también registrado en el Perú, es sorbete. Véase un ejemplo de Rafo León en la revista limeña Caretas: “¿No será que se te ha dado por tomar la leche con cañita?” (28/9/2000). Cañita no se documenta en el DRAE 2014 ni en el oficial Diccionario de americanismos (2010)