Diego Macera

Por obvios motivos, el país está más atento que nunca a los indicadores inmediatos de recuperación económica. Mes a mes, los datos de empleo, recaudación tributaria, evolución del PBI o despachos de cementos llenan páginas de análisis. Como a paciente convaleciente, medir constantemente el pulso a la economía posibilita tomar decisiones oportunas y mejorar lo que haga falta.