Monseñor y la perra vida, por Fernando Vivas
Monseñor y la perra vida, por Fernando Vivas
Fernando Vivas

Me conmueve la franqueza de los viejos: a través de ellos habla la experiencia descarada, la frustración de todo lo hecho por gusto, del tren que se les va, de las ideologías que ya no saben para qué diablos sirven. Por eso, sus impromptus son tan elocuentes. No hay que condenarlos por ellos, hay que agradecérselos. 

Como a PPK cuando dijo que Verónika “no ha hecho nada en su perra vida”. Le salió del alma esta requisitoria contra la izquierda que, en su visión de ‘grumpy old man’, cuestiona todo y no hace nada. Con esa arenga –ojo que no fue una respuesta a un periodista que lo sacó de quicio, sino el remate de un discurso bien hilvanado– PPK ha llamado a los jóvenes a que dejen aflorar su lado proactivo emprendedor y no se dejen vencer por su lado caviar diletante. Por supuesto, eso merece mil respuestas de sus opuestos ideológicos. Las tendrá.

El arzobispo de Arequipa, Javier del Río Alba, no es viejo (tiene 58 años), pero sí arrebatado. Al advertir a sus feligreses que no voten por Verónika Mendoza ni por Alfredo Barnechea, fue impertinente e imprudente. Pero dejó enfática constancia de lo obvio: que la jerarquía católica es tremendamente derechista en el Perú y cree que los partidos que han gobernado el país con la venia del statu quo empresarial (o sea el fujimorismo, el Apra y en parte PPK) garantizan que no habrá matrimonio gay ni aborto despenalizado.

Además de intolerante, la Iglesia suele estar desinformada. En 1990 apoyó descaradamente a Vargas Llosa –¡sacaron en procesión al Señor de los Milagros!– porque temía la competencia que le harían los evangélicos que respaldaban a Fujimori. Sin embargo, MVLl era partidario de reformas laicas; Fujimori y los evangélicos acabaron siendo grandes aliados del catolicismo.

A Del Río se le pasa que Keiko, PPK y Alan simplemente han sido más cautos que Verónika y Barnechea al hablar sobre aborto y matrimonio gay. En el fondo piensan muy parecido, pero se cuidan de hacerlo explícito y prefieren optar por el viejo truco de dejar a sus militantes en libertad de conciencia. Al fin y al cabo, esas reformas quedan al voto en el Congreso. Y hay liberales en sus listas. Cecilia Chacón encabeza la de Fuerza Popular por Lima, Mauricio Mulder la de la Alianza Popular, a Carlos Bruce le respetan sus ideas pro-LGTB en Peruanos por el Kambio.

El arzobispo ha revivido el debate sobre el Estado laico que hay dentro de cada partido. Para quienes somos ‘pro perra vida’, porque defendemos la libertad de hacer lo que uno quiera con su perra vida, se lo agradecemos. Y háganos un favorcito adicional, monseñor: díganos por quién votar. Para conocerlos bien.