Un país como el nuestro necesita Pilares como ella. Es Pilar Jáuregui, quien, como dicta su nombre, ya es uno de los soportes más fuertes del deporte paralímpico en el Perú. Y ayer lo demostró al alcanzar la medalla de oro en parabádminton en la categoría de silla de ruedas, la quinta presea dorada de la delegación, la número quince en total tal como se tenía previsto.
Sin culpas, ella asegura que en un inicio no le gustaba el parabádminton, pero es el deporte que mejor la acogió y hoy lo recompensa con una nueva presea –que se suma a la de Jesús Salva (bronce) y Pedro Pablo de Vinatea (oro)– y qué mejor que en su primera presencia en unos Parapanamericanos.
Ayer, con el Polideportivo 3 de la Videna totalmente abarrotado, con el presidente Martín Vizcarra presente, con sus padres alentando todo el tiempo, Pilar se hizo con el quinto oro para Perú gracias a su sólida victoria por 21-12 y 21-1 sobre la canadiense Yuka Chokyu, su compañera y amiga.
—Historia deportiva— Ella nunca quiso dejar de jugar. Los dolores de cadera aparecieron a los 9 años, pero ese ímpetu de la niñez hacía que le restara importancia. Fue jugando vóley que la realidad la golpeó más fuerte: un salto para bloquear, la caída y el dolor insoportable. Tenía 14 años y su vida empezaba a cambiar debido a la luxación de cadera congénita bilateral.
Las tres operaciones, la silla de ruedas y la depresión hicieron mella en ella hasta que reapareció ese ímpetu por el deporte para sacarla del hoyo. Ya a los 22 años decidió regresar y lo hizo probando distintos deportes y fue el básquet en silla de ruedas el primero que la atrapó. De hecho, fue capitana de la selección nacional en Toronto 2015.
Sin embargo, gracias a la invitación de Pedro Pablo de Vinatea probó el parabádminton y ya en el 2016 ganaba sus primeras medallas. Hoy, es la mejor de América y está en el top 5 del ránking mundial.
—Nueva historia— Perú cierra los Juegos Parapanamericanos con la satisfacción de 15 medallas, pero también con el reto de seguir dando pasos. Las nuevas sedes son el primer escalón superado. Se debe sumar el interés de las autoridades en general y de la empresa privada para apoyar a cada uno de estos héroes deportivos, a los que ganan y a los que van camino de lograrlo. Es el principal legado que debemos tener.