Con el mismo honor de haber sido el encargado de encender el pebetero, Carlos Felipa levantó la medalla de plata que logró ayer en lanzamiento de bala F63 (amputados de extremidades inferiores con prótesis) en estos Juegos Parapanamericanos Lima 2019. El paradeportista con formación militar contó con el apoyo de sus compañeros y su familia y le regaló el segundo lugar en su disciplina.
En un enfrentamiento desigual con el brasileño Evaristo de Souza, quien padece de atrofia de la rodilla izquierda, pero no tiene amputada la pierna (categoría T42), Felipa logró lanzar la bala 10 metros y 71 centímetros frente a los 13 de quien finalmente ganó la presea dorada y logró el récord parapanamericano. El colombiano Enrique Armella quedó tercero con 10,21 metros.
“Es bueno saber que se está iniciando este movimiento que enaltece el honor de todos los peruanos”, aseguró quien fuera campeón mundial militar en lanzamiento de bala el año pasado. “Hay que hacer notas sobre las personas que luchan en la vida y en el deporte”, dijo Felipa sobre lo que significa para ellos representar al país, sobre todo él que perdió la pierna izquierda y parte de la derecha por una mina colocada por los terrorista en el Vraem.
Quedó un sinsabor en la delegación peruana, ya que consideraron que el brasileño compitió con ventaja en esta categoría. “Tiene la pierna completa. Es como si te vendarás la rodilla. A veces no se entienden algunas decisiones”, explicaron desde el equipo de Felipa a El Comercio sobre esta unión de las categorías.
Pese a ello, Felipa se concentró en lo suyo y realizó sus seis lanzamientos de manera correcta, mientras que el brasileño tuvo tres nulos.