“Lo que veo humildemente, y con todo respeto, en el Señor de la Amargura, es un Cristo que carga una cruz y me pregunto quién le puso esa cruz. Se la pusimos nosotros (…) juzgándolo y llevándolo al calvario. Somos nosotros los que lo juzgamos y lo hacemos cargar una cruz y él con un amor en el que yo no encuentro fronteras, en el que yo no encuentro límites, un amor para todos, se sacrifica por nuestros pecados”.
Esta fue parte de la respuesta del ministro de Cultura, Salvador del Solar, al arzobispo de Arequipa, Javier Del Río Alba, luego de que este le pidiera que se añada al currículo escolar educativo 2017 una disposición final que prohíba la supuesta ideología de género.
Ocurrió durante una ceremonia religiosa por el nonagésimo aniversario de la Fiesta del Señor de la Amargura, en el distrito de Paucarpata, en Arequipa. El arzobispo consideró que tal disposición podía terminar con la “confusión” que se ha creado en torno al tema. Del Río, además, pidió al ministro transmitir su solicitud al presidente de la República y a la señora ministra [de Educación]
“Tengo la impresión de que como sociedad le estamos poniendo la cruz a personas que consideramos que no entran en los moldes de nuestra manera de ver las cosas. Creo que esa reflexión cabe… Vale la pena que reflexionemos y pensemos si tal vez no somos injustos, si juzgamos a personas tan peruanas como nosotros, seguramente tan católicas como nosotros, a las que hoy le ponemos esa cruz. No voy a entrar en un debate, solo comparto esa inquietud”, finalizó Del Solar.