Chilca: los lujos de una mafia que atemorizó al sur [VIDEO]

En Chilca aún se respira miedo. La madrugada del 6 de abril, el alcalde del distrito, Richard Ramos Ávalos, y otras 35 personas fueron detenidos por presuntamente integrar la organización delictiva Los Rucos, una mafia dedicada a la extorsión y tráfico de terrenos en el sur de Lima. Han pasado dos semanas, pero los vecinos evitan hablar sobre lo sucedido. Ellos temen que los presuntos delincuentes salgan de la cárcel y el terror se imponga nuevamente.

“Estamos con los pelos de punta. Antes, si ellos se enteraban de que tú denunciabas algo, venían y te amenazaban, por eso ahora nadie quiere hablar”, afirma una vecina.
La mayor parte de la población de Chilca, de aproximadamente 40.000 habitantes, no tiene agua y desagüe. En las comunidades de la periferia, asentadas hace más de 50 años, los vecinos utilizan silos y compran agua potable a S/4 el tanque porque no tienen otra alternativa.

El asentamiento humano 15 de Enero es uno de esos pueblos que viven en la precariedad, pero donde la presencia de lujosas viviendas llama la atención. Según el Ministerio Público, este asentamiento humano fue el centro de operaciones de Los Rucos de Chilca. La hipótesis de la fiscalía es que varias de estas casas serían propiedad de los más altos mandos de la organización criminal.

Las lujosas casas de la mafia de Chilca vistas desde un dron https://t.co/pRJAZbdMNH pic.twitter.com/s5LanM4avy— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) 22 de abril de 2017

“¿Cómo se explica que alguien que quiere vivir con comodidades construya viviendas tan grandes en una zona pobre? No tiene sentido. Todos aquí sabemos que Los Rucos viven allí”, dice un vecino.

El Comercio recorrió este sector de Chilca y con un dron sobrevoló cerca de 30 ostentosas viviendas de hasta 1.200 m2. Desde lo alto se observa que la mayoría cuenta con piscinas y grandes jardines.

—Desgobierno—
En 15 de Enero y en los asentamientos Olof Palme y Papa León XIII, la población está preocupada, además, por la paralización de la obra de agua y alcantarillado. La construcción se inició en enero de este año, se detuvo en marzo por el desborde de dos ríos y ahora por el arresto del alcalde.

Según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la obra está valorizada en S/8,3 millones. Hasta la fecha la municipalidad ha desembolsado S/282 mil.
Este Diario acudió en tres oportunidades a la Municipalidad de Chilca para solicitar información de las obras, pero el personal argumentó que el responsable, hasta ese momento el administrador, no contaba con tiempo. Algunos trabajadores edilicios dijeron que ni el gerente municipal ni el teniente alcalde Damián Huapaya ni los demás regidores acuden a la comuna.

“El servicio de limpieza pública continúa normal, la ausencia del alcalde no se siente porque no ha hecho grandes obras”, señala un vecino.

Algunos piden que se realicen nuevas elecciones porque los funcionarios que gobernarán el distrito son de confianza del detenido alcalde.