José Cayetano

En la Línea de la Concordia, punto fronterizo entre Perú y , decenas de ciudadanos extranjeros, mayoritariamente venezolanos, permanecen varados en la carretera Panamericana entre los complejos fronterizos de Santa Rosa (Tacna) y de Chacalluta (Arica). Pese a recientes riñas con miembros del personal de la (PNP) y las peruanas, llevan dos semanas pernoctando en el desierto sin lograr su objetivo: ingresar al Perú.

Vicente Romero, ministro del Interior, estuvo el jueves en el complejo limítrofe de Santa Rosa para observar la labor de resguardo de la frontera con Chile a cargo del Ejército, la Superintendencia Nacional de Migraciones y la PNP. En ese sentido, en una entrevista para RPP el día de ayer, Romero declaró que para alojar a los migrantes indocumentados que no pueden cruzar la frontera.

Me puse en contacto con el Gobierno Regional y ellos han quedado en que, en los más pronto posible, van a buscar un albergue para dar una ayuda humanitaria. Entiendo que hoy día van a ver el lugar adecuado para llevarlos”, informó.

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El ministro se mostró a favor de que se facilite el retorno de los ciudadanos extranjeros por vía terrestre o aérea. “Si ellos [los migrantes indocumentados] quieren regresar a su país, tenemos que ver las formas de cómo mitigamos ese problema. Es un tema de poder consensuar, reunirnos y dar una solución, porque sino esto cada vez se va a agudizar más”, comentó.

Debate

El Comercio conversó con tres ex funcionarios de los ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores para conocer su opinión al respecto de la medida anunciada por Vicente Romero.

Carlos Pareja, quien fungió como embajador peruano en Chile entre 2009 y 2014, periodo que incluyó el proceso Corte Internacional de La Haya sobre delimitación marítima entre ambos países, se mostró a favor. Pareja subraya que la permanencia de ciudadanos extranjeros en albergues en Tacna debe ser temporal.

“Es una medida de carácter humanitario favorable siempre y cuando sea una acogida temporal que no se salga del control de las autoridades. De lo contrario, se incentivará a que ciudadanos indocumentados de todos los países lleguen a las fronteras para buscar esta asistencia”, sostiene.

390 agentes de la Policía Nacional fueron desplegados en la Línea de la Concordia para evitar el paso irregular de extranjeros. | Foto: Jhon Surco (El Comercio).
390 agentes de la Policía Nacional fueron desplegados en la Línea de la Concordia para evitar el paso irregular de extranjeros. | Foto: Jhon Surco (El Comercio).

Asimismo, el ex embajador considera que el estado de emergencia actualmente vigente en Tacna permite que las Fuerzas Armadas apoyen a la Policía Nacional en la preservación del orden interno en la región así como en las zonas fronterizas.

Por su parte, Miguel Ángel Rodríguez Mackay, excanciller de la República, está en contra del anuncio de Romero. “El ministro demuestra un error conceptual de ubicuidad. Si los ciudadanos extranjeros logran instalarse en en territorio nacional, el Perú habrá cedido al objetivo chileno inicial, que consistió en expulsar a los migrantes para que ingresen a nuestro país”, afirma.

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El internacionalista advierte que los extranjeros no cumplirían con permanecer temporalmente en el Perú. Además, asegura que al mantenerse en nuestro país en albergues, ellos podrían obtener otro status jurídico: “Obtendrían la condición de refugiados, que obliga al Perú a asistirlos debido a condiciones de protección para refugiados establecidas en el derecho internacional”.

Rodríguez asevera que acoger a los migrantes en albergues finalizaría las conversaciones diplomáticas con Chile para resolver la crisis migratoria en conjunto, puesto que el Perú sería el único responsable de la situación de los extranjeros. Por ello, Rodríguez afirma que la mejor solución consiste en establecer un consenso multilateral entre Perú, Chile, Ecuador, Colombia y Venezuela para establecer un corredor humanitario que permita a los migrantes venezolanos indocumentados retornar a su país de origen.

“El gobierno venezolano debe formar parte de las negociones, porque no tendría sentido aprobar el corredor [humanitario] si Maduro no quiere recibir a sus compatriotas. Debe buscarse una aceptación expresa de su gobierno, que debe velar por sus connacionales y comprender que la crisis que creó provocó el éxodo de ciudadanos”, explicó.

Por otro lado, Ricardo Valdés, exviceministro del Interior está a favor de recibir temporalmente a los migrantes en albergues temporales, puesto que considera “inhumano dejarlos en la frontera”. Valdés destaca la importancia de censarlos.

Lo más sensato es realizar un censo para conocer la situación en que se encuentran. Esto permitirá que en favor de familias, adultos mayores, etcétera, intervengan el ministerio de la Mujer y el ministerio de Desarrollo, y organismos internacionales como la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur)”, explica Valdés.

El exviceministro asegura que al realizar este registro debe verificarse los antecedentes penales. Si han cometido un delito en otro país, corresponde devolverlos a ese lugar para que sean procesados y juzgados, afirma.

Valdés también está de acuerdo con el establecimiento de un corredor humanitario para el retorno de los venezolanos indocumentados a su país a partir de un acuerdo entre países de la región. El experto indica que el Estado peruano debe otorgar a estos ciudadanos un salvoconducto.

Es importante que cuenten con un salvoconducto que le permita atravesar el resto del país, porque hay que garantizar que las familias de migrantes puedan tener el apoyo del Estado mientras recorren los casi 3.000 kilómetros entre Tacna y Tumbes. Cuando lleguen a Tumbes, estas coordinaciones deben continuar con el estado colombiano para acercarlos a la frontera venezolana”, detalla.

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