(Foto: ACCA / Andina)
(Foto: ACCA / Andina)

Los nevados Cayangate, Tacusiri, Surimani, Qolpacunca, Chimboya, Chumpi, Ambroca, y el glaciar de Quelccaya, ubicados en la Cordillera de Vilcanota, región Cusco, forman parte de la propuesta de creación del Área de Conservación Regional (ACR) Ausangate

Daniela Pogliani, directora ejecutiva de Conservación Amazónica (ACCA), afirma que estos nevados son componentes importantes del sistema hídrico del Cusco, razón por la cual su conservación es prioritaria. 

Además de este grupo de montañas, diversos glaciares también forman parte de la gran Cordillera del Vilcanota, siendo el Quelcaya el más extenso del mundo y uno de los dos únicos glaciares planos en la zona tropical. 

El Quelcaya se caracteriza por tener una gran relevancia científica, pues permite estimar el ritmo de desglaciación de estas montañas y analizar los cambios climáticos ocurridos en el trópico desde la última era glaciar. 

“El área es valiosa para la preservación de las cuencas que alimentan de agua a una gran parte de la región Cusco y por el desarrollo de la actividad turística que atrae anualmente a miles de visitantes que buscan practicar deportes de aventura y apreciar las bellezas paisajísticas que ofrece el lugar”, afirmó Pogliani. 

En este lugar nace el río Salca, el cual recorre la zona altoandina e interandina y aporta sus aguas al río Urubamba que alimenta directa y continuamente -sobre todo en la época de estiaje y bajo caudal- a la generadora eléctrica de Machu Picchu, que abastece de energía a la macrorregión Sur. 

La directora ejecutiva de Conservación Amazónica (ACCA) confirmó que el ACR Ausangate es una iniciativa del Gobierno Regional del Cusco que busca conservar alrededor de 67.000 hectáreas que albergan una muestra representativa de ecosistemas de montaña, glaciares y lagunas en la región. 

La propuesta ya ha sido elevada al Poder Ejecutivo por el Gobierno Regional del Cusco y se espera su aprobación para la declaratoria del ACR.

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