El Ministerio de Justicia nombró a Javier Wilfredo Paredes Sotelo como procurador público ad hoc en el proceso de extradición activa del ciudadano argentino Mauro Nicolás Fernández, investigado por delito contra el Patrimonio Cultural en las líneas de Nasca.
Como vocero de Greenpeace, Mauro Fernández participó en la colocación de letras de plástico en el entorno de la figura del Colibrí. El hecho ocurrió el 8 de diciembre del 2014. El Ministerio de Cultura denunció el hecho ante el Ministerio Público, que emitió una orden de detención contra Fernández cuando este ya había salido del país.
La última información que se tuvo sobre Fernández data del 6 de febrero de este año, cuando la ONG ambientalista Greenpeace negó que su vocero había sido detenido por la Fiscalía argentina.
Según Greenpeace, Fernández se puso a disposición de la Justicia de su país, que considerando el caso peruano le dictó un impedimento de salida de la Argentina.